Los bebés de 4 meses ya tienen autoconsciencia respecto a su entorno

Con tan solo cuatro meses de edad los bebés ya son capaces de comprender cómo interactúan sus cuerpos con el espacio que los rodea, según ha demostrado un estudio realizado por científicos del Birmingham BabyLab de la Universidad de Birmingham, cuyos resultados contribuyen a desvelar cómo se desarrolla la autoconciencia.

Los investigadores mostraron a los bebés una pelota en una pantalla que se acercaba o se alejaba de ellos. Cuando la pelota estaba más próxima a ellos en la pantalla, a los bebés se les aplicaba un “toque” (una pequeña vibración) en sus manos mientras se medía su actividad cerebral. La recopilación de datos para el estudio se llevó a cabo en Goldsmiths (Universidad de Londres). Los resultados se han publicado en Scientific Reports y revelan que estos bebés tan pequeños muestran una mayor actividad cerebral somatosensorial (táctil) cuando un toque es precedido por un objeto que se mueve hacia ellos.

“Nuestros hallazgos indican que incluso en los primeros meses de vida, antes de que los bebés hayan aprendido a alcanzar objetos, el cerebro multisensorial está conectado para establecer vínculos entre lo que los bebés ven y lo que sienten. Esto significa que pueden sentir el espacio que los rodea y comprender cómo interactúan sus cuerpos con ese espacio. A esto a veces se le llama espacio peripersonal”, ha explicado la Dra. Giulia Orioli, investigadora en Psicología de la Universidad de Birmingham, que ha dirigido el estudio.

“Por supuesto, los humanos hacemos esto todo el tiempo cuando somos adultos, usando nuestros sentidos combinados para percibir dónde estamos en el espacio y haciendo predicciones sobre cuándo tocaremos un objeto o no. Pero ahora que sabemos que los bebés en las primeras etapas de su desarrollo comienzan a mostrar signos de esto, surgen preguntas sobre cuántas de estas habilidades son aprendidas o innatas”.

En busca de los orígenes de la conciencia humana

Los investigadores también analizaron cómo un “toque” inesperado afectaría a algunos de los bebés del estudio que eran más mayores y comprobaron que, en los bebés de ocho meses de edad, cuando el toque en su mano era precedido por la pelota en la pantalla alejándose de ellos, su actividad cerebral mostraba señales de que estaban sorprendidos.

Andrew Bremner, profesor de Psicología del Desarrollo, comentó: “Ver a los bebés mayores mostrar respuestas de sorpresa sugiere que no esperaban el contacto debido a la dirección visual en la que se movía el objeto. Esto indica que, a medida que los bebés avanzan durante su primer año de vida, sus cerebros construyen una conciencia más sofisticada de cómo existe su cuerpo en el espacio que los rodea”.

“En los primeros meses de vida, antes de que los bebés hayan aprendido a alcanzar objetos, el cerebro multisensorial está conectado para establecer vínculos entre lo que los bebés ven y lo que sienten”

El próximo objetivo de los investigadores es realizar un seguimiento de este estudio con participantes más jóvenes y mayores. La investigación con adultos puede ayudar a comprender los tipos de actividad cerebral hacia los que se están desarrollando los bebés. También esperan poder determinar si existen signos tempranos de estas habilidades “multisensoriales” en los bebés recién nacidos.

“Es un desafío trabajar con recién nacidos, ya que pasan una gran parte de su tiempo durmiendo y comiendo, pero estamos empezando a tener cierto éxito trabajando con este grupo de edad, y será fascinante ver si los bebés de sólo unos días tienen las bases para sentir su cuerpo en el espacio. Si es así, podría ser que estemos ante los orígenes de la conciencia humana”, ha concluido la Dra. Orioli.