Los menores españoles toman demasiados azúcares añadidos
08/01/2018
En 2015 la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzaba una advertencia para moderar el consumo de azúcar, en la que recomendaba, tanto a los adultos, como a los niños, que los azúcares añadidos no sobrepasaran el 10% de la ingesta total de energía diaria, aunque no superar el 5% se considera más saludable. Por ello, Emma Ruiz, de la Facultad de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo, junto con Gregorio Varela-Moreiras, de la Fundación Española de la Nutrición (FEN) han querido conocer cuáles son los niveles de consumo de esta sustancia en cada grupo de edad en España.
El estudio que contiene todos los datos, llamado ANIBES (Antropometría, ingesta y balance energéticos en España), ha analizado los hábitos de consumo diarios de hidratos de carbono de 2.285 personas –donde 1.152 eran hombres y 1.133 mujeres–, con edades comprendidas entre los 9 y los 75 años, para averiguar si la ingesta de azúcares totales –intrínsecos (los que están en los productos frescos de manera natural, como en el caso de la fruta, o las verduras) y azúcares libres o añadidos (presentes en alimentos envasados como los zumos y los platos precocinados)– de los españoles se corresponde con las recomendaciones de la OMS, y sus resultados se han publicado en la revista Nutrición Hospitalaria.
Los adolescentes ingieren el máximo de azúcar recomendado por la OMS
El consumo medio de azúcares intrínsecos en los españoles constituye un 9,6% de su ingesta calórica total diaria y el de azúcares libres, el 7,3%, por lo que se encuentra por debajo de los límites máximos establecidos por la OMS. Sin embargo, diferenciando por grupos de edad se observan algunos datos importantes, y en el caso de los azúcares añadidos, el consumo de los niños de entre 9 y 12 años representa el 9,8% del total de energía diaria (rozando el límite de la OMS), y el de los adolescentes entre 13 y 17 años, un 10%, por lo que se encuentran en un punto crítico que puede poner en riesgo su salud.
Los mayores son los que más cantidad de azúcares intrínsecos ingieren, mientras que los adolescentes tienen las cifras más altas en el consumo de azúcares añadidos
Los adultos entre 18 y 64 años, y los mayores entre 65 y 75 años, tienen tasas más bajas de ingesta de azúcares añadidos: 7,1% y 5,1%, respectivamente. Y en este grupo de la población el porcentaje que cumple la recomendación de que su ingesta de azúcares añadidos sea inferior al 10% es de un 76,7% en los adultos de 18 a 64 años, y aumenta hasta el 89,8% en la franja de edad de 65 a 75 años.
Fuentes de azúcares intrínsecos y añadidos
Del total de los hidratos de carbono que se consumen en España, y que suponen un 41,1% de la ingesta total de energía diaria, el 17% son azúcares, que se dividen a su vez en 9,6% intrínsecos, y un 7,3% corresponde a los añadidos. Pero también es importante conocer de dónde procede la cantidad de azúcares que se ingiere cada día. Así, la principal fuente de azúcares intrínsecos se encuentra en la leche y sus derivados y en las frutas, mientras que los alimentos que constituyen las principales fuente de azúcares añadidos para los participantes del estudio ANIBES son azúcares y dulces (34,1%), las bebidas sin alcohol, en especial los refrescos (30,8%), y los cereales con sus derivados (19,1%).
En el estudio se ha observado que el aporte de azúcares intrínsecos es más alto en el grupo de la tercera edad, pues los mayores tienden a tomar más frutas y verduras, mientras que el de los azúcares añadidos lo encabezan los adolescentes, seguidos por los adultos, en ambos casos a consecuencia del consumo excesivo de refrescos que contienen edulcorantes artificiales.
Actualizado: 4 de mayo de 2023