Sanidad opta por un regreso presencial a las aulas y menos cuarentenas

Debido al gran aumento de los contagios por la variante ómicron del coronavirus existían dudas sobre qué medidas se iban a tomar para la vuelta al cole de los estudiantes en España este 10 de enero. El Ministerio de Sanidad ha informado de que el regreso a las aulas será totalmente presencial y que se reforzarán las medidas de prevención y comunicación contra el coronavirus, insistiendo en el uso de mascarilla en los recreos, la ventilación cruzada y los grupos burbuja. Además, se mantendrán por ahora, hasta una próxima reunión, los aislamientos en los casos positivos y cuarentenas en los contactos estrechos sin pauta completa de vacunación, aunque se reduce el periodo de las mismas de diez a siete días.

Esta medida ha sido acordada en la reunión extraordinaria del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) junto con la Conferencia Sectorial de Educación y la Conferencia General de Política Universitaria. Todos han subrayado la importancia de que se hayan mantenido las clases presenciales durante la pandemia, siempre manteniendo las medidas de control impuestas contra el COVID-19, como uso de mascarillas y ventilación, indicando que ha sido un éxito en todos los niveles educativos.

Carolina Darias, ministra de Sanidad de España, ha explicado que con el acuerdo alcanzado por las comunidades y ciudades autónomas y el Gobierno se cumple el mandato del presidente Pedro Sánchez tras la Conferencia de Presidentes, en la que expuso que de debía “garantizar la presencialidad en las aulas para que nuestros niños, niñas y jóvenes puedan desarrollarse completamente”.

Solo 12 centros escolares cerrados por COVID-19

La decisión ha sido tomada teniendo en cuenta que los datos de contagios en las aulas del sistema educativo no universitario se mantuvieron bajo control durante el anterior curso escolar, concretamente con un número de aulas en cuarentena por debajo del 0,5%. No obstante, también se ha valorado el aumento de los casos de la variante ómicron, que, según indican, alcanzó su pico más alto el 22 de diciembre de 2021, en el que un 1,3% de las aulas estaba en cuarentena, lo que supone 5.433 clases de unas 417.000.

“Cerrar las escuelas implica una pérdida enorme en los aprendizajes y pone en riesgo el bienestar psicológico y la salud emocional de niños y adolescentes”

Además, recalcan que en ese periodo solo 12 centros escolares tuvieron que ser cerrados debido a brotes de COVID-19, lo que supone un 0,04% del total de centros educativos del país. Darias ha insistido en que la mejor medida para luchar contra este coronavirus es la vacunación, por ello, explica, es tan importante continuar con la vacunación en todos los grupos de edad.

“A pesar de la situación epidemiológica provocada por la variante ómicron del coronavirus y de la lógica preocupación que suscita, la vuelta a clase en la fecha prevista y con cumplimiento riguroso de los protocolos de prevención ya conocidos (tanto dentro como fuera de las aulas) es la mejor opción para los escolares, para las familias y para el conjunto de la comunidad educativa, porque cerrar las escuelas –lo sabemos ya después de 21 meses de pandemia– implica una pérdida enorme en los aprendizajes y pone en riesgo el bienestar psicológico y la salud emocional de niños y adolescentes. Así lo confirman los recientes estudios del Banco Mundial, UNESCO y UNICEF”, ha declarado Pilar Alegría, ministra de Educación.

Presencialidad también en la educación universitaria

En el terreno universitario, también se ha recalcado la importancia de la presencialidad en la vuelta a las clases. Por otro lado, la preocupación por la convocatoria de exámenes ha sido aclarada bajo la premisa de que nadie perderá convocatoria por motivo de contagio o por confinamiento debido al COVID-19.

Ningún estudiante universitario perderá convocatoria por motivo de contagio o por confinamiento debido al COVID-19

Joan Subirats, ministro de Universidades, indicó que se deben intensificar la implementación de los protocolos ya existentes contra el SARS-CoV-2, así como de los canales de comunicación con los universitarios. Además, añade que “tal y como han indicado los expertos y expertas, los contagios que se producen en la franja de edad correspondiente a la comunidad universitaria no se están produciendo en el propio ámbito universitario si no fuera de él, reafirmando así la certeza de que las aulas son, en términos generales, espacios seguros”.