Un exceso de extraescolares perjudica la salud mental de los estudiantes
13/03/2024
La mayoría de los estudiantes realizan actividades extraescolares en algún momento de su vida académica y aunque cuando los niños son más pequeños uno de sus objetivos sea ayudar a los padres y madres a conciliar el horario lectivo de sus hijos con el de su jornada laboral, se considera que aportan beneficios a los menores, ya que estas tareas extracurriculares suelen incluir conocimientos o la práctica de deportes que no se imparten en las clases normales (otro idioma, música, programación, ballet, tenis, artes marciales…).
Sin embargo, la virtud está en el término medio, y tan malo es pasarse como no llegar. Ahora, un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Georgia ha descubierto que el tiempo que los estudiantes de secundaria dedican a actividades extraescolares, como tutorías, deportes, clubes escolares, e incluso los deberes, está afectando negativamente a su salud mental. El estudio también ha revelado que añadir actividades de extraescolares adicionales probablemente no reportará beneficios académicos a los estudiantes.
Aunque el número ideal de horas de estudio varía de un estudiante a otro, los investigadores han llegado a la conclusión de que incrementar las actividades extraescolares probablemente no sea beneficioso. En contradicción con la creencia popular de que más tiempo de estudio o tutorías conducen a buenos resultados en los exámenes y mejores calificaciones, esta investigación indica que los estudiantes ya han alcanzado su límite y que cualquier “actividad” adicional podría resultar contraproducente.
“Descubrimos que el efecto de esas actividades adicionales en las habilidades cognitivas, esa última hora, es básicamente nulo”, ha afirmado Carolina Caetano, coautora del estudio y profesora asistente de economía en el Terry College of Business de la UGA. “Y lo que es más sorprendente es que esa última hora dedicada a estas actividades está afectando negativamente a las habilidades no cognitivas del niño”. Los hallazgos se han publicado en Science Direct.
Flexibilizar los horarios de los niños para que disfruten de más tiempo libre
Las habilidades no cognitivas incluyen la regulación emocional y el bienestar, y están relacionadas con la resiliencia y las habilidades de comunicación. Al analizar cómo emplean su tiempo los adolescentes y cómo esto influye sobre las habilidades cognitivas o académicas frente a las habilidades no cognitivas o socioemocionales, Caetano señaló que la mayoría de los estudiantes de secundaria están maximizando el beneficio académico de estas actividades mientras pierden habilidades socioemocionales.
Caetano sugiere que es mejor visualizar la relación entre las actividades extraescolares y estas habilidades como una curva. Inicialmente, una hora adicional de estudio, tutoría o actividad formal puede ayudar a los estudiantes a adquirir más habilidades y ascender en la curva de habilidades académicas. Sin embargo, el día tiene un límite de horas, y cuanto más tiempo dedique el estudiante a las tareas extraescolares, menos tiempo tendrá para otras actividades como descansar, socializar libremente y dormir.
Estas actividades también son valiosas para desenvolverse en la vida y retener los conocimientos. Si un niño no descansa lo suficiente podría perder algunos de sus avances académicos porque no puede retener lo aprendido, y también podría perder avances socioemocionales porque no socializa lo suficiente, o porque se estresa. Al final las pérdidas se equiparan con las ganancias y los beneficios de las actividades extraescolares alcanzan su máximo.
En este punto, la mayoría de los estudiantes están en la cima de la curva de habilidades académicas, y cualquier enriquecimiento adicional disminuirá sus habilidades académicas. Además, ese tiempo se resta de actividades que promueven habilidades socioemocionales, lo que resulta perjudicial y puede generar ansiedad, depresión y arrebatos por estar sobrecargados. De hecho, el estudiante habría estado mejor, en términos de habilidades no cognitivas, si hubiera reducido las actividades extraescolares, asegura Caetano.
“Las habilidades no cognitivas son muy importantes, no solo para la felicidad futura, sino también para el éxito profesional, pero la gente no siempre piensa en ellas porque son difíciles de medir”
“Has alcanzado el máximo de lo que puedes adquirir académicamente con ese trabajo”, dijo. “Pero en la curva de habilidades no cognitivas, has pasado el máximo y entrado en la parte descendente de la curva. En ese punto, estás perdiendo habilidades socioemocionales”. Psicólogos y educadores han señalado el potencial daño de la sobrecarga de actividades durante años, dijo Caetano, y este estudio proporciona evidencia causal sólida que respalda su argumento.
Este estudio utilizó datos detallados de 4.300 niños desde el jardín de infancia hasta el último año de secundaria. Los investigadores examinaron tres grupos de edad: niños de primaria, secundaria y bachillerato. Los estudiantes de bachillerato se enfrentan a la peor situación, según Caetano, pero eso no significa que los estudiantes más jóvenes estén bien. Están en la cima de la curva, dijo, lo que significa que cualquier actividad adicional les abocará a rendimientos negativos.
“Si observas a los niños de primaria y secundaria, están en rendimientos nulos tanto para habilidades cognitivas como no cognitivas”, dijo. “Aunque aún no han entrado en un área negativa, el trabajo adicional probablemente les perjudicará”. Si acaso, Caetano dijo que deberíamos ver la situación de los estudiantes más jóvenes como una oportunidad para desarrollar más habilidades sociales y no académicas. Flexibilizar los horarios de los niños y permitirles disfrutar de más tiempo libre podría conducir a habilidades de regulación emocional que luego beneficiarán el saturado horario de preparación universitaria al que se enfrentan los estudiantes de secundaria.
“Las habilidades no cognitivas son muy importantes, no solo para la felicidad futura, sino también para el éxito profesional, pero la gente no siempre piensa en ellas porque son difíciles de medir”, dijo. Caetano admite que encontrar una solución al exceso de programación es complicado. Es importante que los niños interactúen con otros niños sin restricciones para que desarrollen sus habilidades no cognitivas, y a algunos padres les podría preocupar alejarlos de actividades extraescolares más medibles.
Sin embargo, el beneficio de desarrollar habilidades para toda la vida podría ser más importante. “Si reduces las actividades de los niños, podrían retroceder ligeramente en habilidades cognitivas, pero sus pérdidas en habilidades no cognitivas ya son tan altas que el cambio podría valer la pena”, dijo Caetano.
El estudio no indica cuál es el número perfecto de horas de actividades extraescolares, pero Caetano dice que los padres deberían evaluar continuamente su bienestar mental, así como el de sus hijos. “Habrá variación entre familias, pero si tuviera que dar una recomendación diría que si cada vez que alguien trata de quedar contigo para jugar siempre estás ocupado, resulta obvio que estás sobrecargado”, concluye.
Actualizado: 13 de marzo de 2024