Consejos para identificar y usar las pulseras repelentes de insectos

Empieza el verano y con la subida de las temperaturas los insectos multiplican su población. Esto hace que muchas personas opten por el uso de algún método para ahuyentarlos, como las pulseras repelentes de insectos. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha lanzado una serie de recomendaciones relacionadas con su uso e información sobre cómo poder identificarlas correctamente.

Lo primero que explican es que existen dos tipos de pulseras, una repelente con biocida y otra cuya función es aromática y no repelente. Solo la primera de ellas contiene sustancias químicas que repelen los insectos –bien impregnando una parte o toda la pulsera, bien en una pastilla que se inserta en la pulsera– y cuenta con una autorización sanitaria, por lo que su seguridad y eficacia ha sido evaluada por la AEMPS o por la Dirección General de Salud Pública, siempre que se siga las condiciones de uso indicadas en el etiquetado.

Las pulseras que indican que tienen citronela son solamente aromáticas, por lo que no tienen biocidas contra los insectos y no están autorizadas

Sin embargo, las pulseras aromáticas no contienen biocidas sino sustancias como la citronela, una planta con un potente olor que se ha relacionado con propiedades repelentes de insectos. Este tipo de accesorio no está sujeto a ninguna evaluación sanitaria, careciendo de número de registro en el etiquetado, y no están autorizados.

¿Cómo identificar las pulseras repelentes autorizadas?

El gran riesgo de estas pulseras se encuentra en que las personas se sientan totalmente protegidas en zonas de riesgo por transmisión de enfermedades por insectos. En consecuencia, la AEMPS aconseja que se evite el uso exclusivo de estas pulseras como método de protección, y que se usen medidas complementarias para esta función, como pueden ser productos en espray, loción o gel, además de seguir las medidas preventivas que indiquen las autoridades sanitarias correspondientes.

Para identificar las pulseras repelentes de insectos que están autorizadas hay que fijarse en el número de registro que debe aparecer en el etiquetado, si lo tiene estará aprobada por la AEMPS o por la Dirección General de Salud Pública. Si contiene algún producto como la citronela se podrá saber que esa pulsera es aromática, y por tanto no dispone de la autorización.

También hay que tener cuidado cuando en el etiquetado se indican elementos asociados a propiedades que no poseen, como, por ejemplo, su uso en zonas tropicales, que nos debe hacer desconfiar.

En cualquier caso, la AEMPS recomienda que no usen estas pulseras repelentes con fines estéticos, y que una vez que concluya su tiempo de uso efectivo deben ser desechadas, evitando su liberación al medioambiente.