El cannabidiol reduce las convulsiones en el síndrome de Dravet
02/06/2017
El cannabidiol (CBD), un derivado del cannabis que carece de propiedades psicoactivas, ha logrado reducir en un 39% la frecuencia de convulsiones en pacientes con síndrome de Dravet, un tipo grave de epilepsia que se manifiesta durante el primer año de vida del bebé, y afecta a uno de cada 20.000-40.000 niños.
En la investigación que ha permitido comprobar estos efectos del CBD, que ha sido realizada por científicos del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York (Estados Unidos), y se ha publicado en The New England Journal of Medicine, han participado 120 niños y adolescentes (de entre dos y 18 años), a los que se administró durante 14 semanas, y junto a su tratamiento habitual, o bien placebo, o bien 20 mg/kg de una formulación farmacéutica líquida de CBD (Epidiolex).
En próximas investigaciones se evaluará la posibilidad de mejorar la seguridad y tolerabilidad de esta terapia, y su uso potencial a largo plazo en el síndrome de Dravet, y en otras formas de epilepsia que no respondan a los tratamientos convencionales
Antes de comenzar el estudio, se había seguido a los pacientes durante un mes para comprobar la frecuencia con la que sufrían convulsiones. En el grupo que recibió el CBD las convulsiones disminuyeron un 39%, pasando de una media de casi 12 convulsiones mensuales, a alrededor de seis. En tres de estos pacientes, además, las crisis epilépticas desaparecieron casi por completo. En el caso de los niños y adolescentes a los que se suministró placebo, la disminución de las convulsiones fue del 13% (pasó de unos 15 episodios mensuales, a 14).
Efectos secundarios del cannabidiol usado con fines terapéuticos
Los investigadores consideran que la reducción de la frecuencia de las crisis convulsivas conseguida con la terapia con cannabidiol es estadísticamente significativa y clínicamente consistente, y aunque han advertido de que este producto no es la solución definitiva para este tipo de epilepsia, señalan que puede contribuir a desarrollar nuevos tratamientos para ayudar a los pacientes que no responden a otros medicamentos.
Los efectos secundarios que experimentaron con más frecuencia los pacientes que tomaron CBD fueron vómitos, fatiga, fiebre y somnolencia, y aunque su intensidad generalmente fue leve o moderada, ocho de los participantes en el estudio se vieron obligados a abandonar el tratamiento debido a los efectos adversos. En próximas investigaciones se evaluará la posibilidad de mejorar la seguridad y tolerabilidad de esta terapia, y su uso potencial a largo plazo en el síndrome de Dravet, y en otras formas de epilepsia que no respondan a los tratamientos convencionales.
Actualizado: 4 de mayo de 2023