El linfedema se podría tratar con un fármaco contra el glaucoma
17/12/2019
En la actualidad no existe una cura absoluta para el linfedema, que se caracteriza por la acumulación de fluidos en brazos y piernas a consecuencia de la obstrucción del sistema linfático. Este trastorno afecta a más de 150 millones de personas en todo el mundo, a las que causa dolor y discapacidad y es, además, una secuela frecuente en pacientes con cáncer de mama que se han sometido a cirugía para extirpar ganglios en la axila.
Las prendas de compresión y los medicamentos antiinflamatorios pueden aliviar la hinchazón, y el drenaje linfático manual y la presoterapia (una técnica en la que se aplica compresión externa de forma intermitente en la extremidad afectada) favorecen la eliminación de los fluidos, pero ninguna de estas u otras terapias constituyen una solución definitiva para los pacientes con linfedema.
Al administrar un compuesto que inactivaba la integrina alfa 5, los vasos del chip lograron drenar el fluido linfático, un efecto que se reprodujo en ratones con linfedema
Ahora, sin embargo, un grupo de científicos de la Cornell University (Ithaca, Nueva York) liderados por el bioingeniero Esak Lee, ha descubierto que el compuesto activo del ripasudil –un fármaco que se usa en Japón para tratar el glaucoma y otras afecciones oculares– inhibe una proteína denominada integrina alfa 5, que podría ser una nueva diana terapéutica para combatir este problema de salud.
Un fármaco eficaz en un modelo de sistema linfático y en ratones
Con el objetivo de buscar mejores tratamientos para el linfedema, los investigadores construyeron un modelo de sistema linfático en un chip, suspendiendo células de vasos linfáticos humanos en colágeno en una pequeña caja de polímero. Este sistema les permitió identificar a la integrina alfa 5 como potencialmente importante para el linfedema.
Habitualmente esta proteína permanece inactiva en las membranas celulares de los tejidos que conforman el revestimiento de los vasos linfáticos, pero cuando los investigadores simularon un linfedema añadiendo moléculas que indicaban inflamación a los vasos del chip, la integrina alfa 5 se activó favoreciendo el estrechamiento de los enlaces celulares y dificultando la circulación de los fluidos linfáticos.
Lee y su equipo administraron entonces un compuesto que inactivaba dicha proteína, lo que permitió a los vasos del chip drenar el fluido linfático. Además, comprobaron que el mismo efecto se producía cuando se lo dieron a ratones a los que se había inducido un linfedema. El inhibidor que emplearon es la misma clase de compuesto –conocido como inhibidor de Rho Kinasa– de ripasudil.
Los resultados del estudio se han presentado en la sesión conjunta de la American Society for Cell Biology y la European Molecular Biology Organization, aunque todavía no se han publicado, y el producto utilizado necesita someterse a análisis adicionales antes de que se intente desarrollar una versión que se pueda probar en humanos.
Actualizado: 17 de diciembre de 2019