La SEPAR pide que los enfermos respiratorios también lleven mascarilla

Desde hace algunos meses en España la mascarilla es un complemento obligatorio fuera de casa para frenar la expansión del COVID-19, sin embargo, en la publicación de los dos reales decretos leyes que regulan su uso se incluye una excepción, y es que las personas con alguna enfermedad o dificultad respiratoria que se pueda ver agravada con el uso de mascarilla están exentas de llevarla, un reconocimiento que deberá otorgar el médico y que se presentará a los miembros de la Policía y Fuerzas de Seguridad del Estado, así como en locales a los que se quiera entrar.

La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y la Federación Española de Asociaciones de Pacientes Alérgicos y con Enfermedades Respiratorias (FENAER) han mandado un escrito al ministro de Sanidad, Salvador Illa, para pedirle que se retire del Boletín Oficial del Estado esta excepción en cuanto al uso de mascarillas, pues todavía no hay suficiente evidencia científica que sustente la excepción y creen que seguir con ella podría tener graves consecuencias para la salud de estos pacientes y de toda la población.

Tener una enfermedad respiratoria te hace más vulnerable al SARS-CoV-2, por lo que los expertos ven contraproducente la excepción en el uso de mascarilla

Se apoyan en los resultados de un estudio científico publicado en la revista European Respiratory Journal en el que afirman que no existe la certeza científica para permitir esta distinción y que incluso podría ser contraproducente, pues precisamente las personas con enfermedades respiratorias son uno de los grupos más vulnerables al SARS-CoV-2 y con peores pronósticos.

Las personas con problemas respiratorios deben usar mascarillas FFP2

Ya el 24 de agosto de 2020, la SEPAR advirtió de la importancia de que todos usen las mascarillas y de que la excepción a personas con problemas respiratorios era improcedente. El 7 de octubre era la FENAER la que emitía una nota de prensa apoyando la retirada del privilegio, pues creen que no se ha demostrado que los cubrebocas afecten de manera negativa a los pacientes con afecciones respiratorias. Además, recomiendan que este colectivo use las mascarillas FFP2, pues consideran que son las más adecuadas para protegerse.

Desde la SEPAR explican que un 7,39% de la población mundial tiene alguna enfermedad respiratoria crónica, un porcentaje que baja ligeramente a 7,1% en el caso de España. Esta cifra se traduce a 4,9 millones de personas en el país que podrían, según el BOE, pasear o entrar en establecimientos sin mascarilla, aumentando el riesgo personal y grupal. Por eso, piden que se rectifique la normativa que permite la excepción a este grupo.