Vinculan los desinfectantes para el hogar con la obesidad infantil
21/09/2018
Usar dos veces a la semana un desinfectante multisuperficie en casa para hacer desaparecer microbios, bacterias, gérmenes y otros patógenos puede tener un impacto negativo sobre el peso de los más pequeños de la casa. Así lo han demostrado un informe canadiense publicado en el Diario de la Asociación Canadiense de Medicina. El fundamento de esta extraña asociación entre los productos de limpieza y la obesidad infantil está en una bacteria, la lachnospiraceae, y su capacidad para alterar la microbiota intestinal.
Según este estudio de la Universidad de Alberta (Canadá), los bebés entre tres y seis meses que viven en hogares donde se utilizan estos productos de forma habitual ven aumentados sus niveles de la bacteria lachnospiraceae, que forma parte de nuestra flora intestinal. Diferentes estudios con animales han asociado una mayor grasa corporal y la resistencia a la insulina con este microorganismo. De esta forma, sería el culpable de que al cumplir los tres o cuatro años, el índice de masa corporal (IMC) de esos bebés criados en un ambiente pulcro sea mayor que el de los pequeños que han vivido en hogares más desaseados, o al menos que en la vida diaria no han estado expuestos a estos desinfectantes pesados.
Los niños que viven en hogares que usan limpiadores ecológicos presentan una microbiota diferente, aunque quizá pueda deberse al estilo de vida de esas familias
En la investigación se analizó la flora intestinal del 757 bebés entre tres y cuatro meses en muestras de heces que proporcionaron los padres. Posteriormente cuando alcanzaron 1 y 3 años se siguió su crecimiento y su peso. Al mismo tiempo, preguntaron a los padres sobre los desinfectantes, detergentes y productos ecológicos que usaban para limpiar el hogar.
Diferente microbiota cuando se usaban productos ecológicos
Y así comprobaron que en los hogares donde usaban desinfectantes en la flora intestinal de los pequeños la bacteria lachnospiraceae había aumentado, y disminuido otras bacteria como Haemophilus y Costridium. En cambio, los niños que vivían en hogares que usaban productos de limpieza ecológicos tenían una microbiota diferente, con niveles más bajos de microbios intestinales enterobacteriaceae y eran menos propensos a tener sobrepeso unos años después. Si la causa de esta circunstancia está en los limpiadores o en que las familias que usan productos más respetuoso con el medioambiente tienen un estilo de vida y de alimentación más sanos que ayudan a la flora intestinal, es algo que se deberá estudiar en estudios más rigurosos.
Hay que tener presente que cada individuo tiene una microbiota o flora intestinal propia y que esta empieza a formarse desde el mismo momento del nacimiento, ya que influye el tipo de parto, cesárea o parto vaginal, y la alimentación recibida. Un estudio de la revista Pediatrics muestra que los bebés nacidos por vía vaginal y alimentados solo con leche materna presenta una microbiota intestinal más beneficiosa. Esto es muy importante para el desarrollo inmune del recién nacido y quizás también para prevenir la obesidad en la infancia. En la actualidad muchos estudios investigan la relación que existe entre la creciente curva de niños con sobrepeso con factores diferentes a la alimentación o el ejercicio, como la microbiota.
Actualizado: 4 de mayo de 2023