Coca-Cola retira de Europa refrescos con exceso de clorato: qué riesgos tiene
31/01/2025
Coca-Cola ha anunciado la retirada del mercado europeo de varios de sus refrescos. El motivo es que ha detectado niveles anormalmente altos de clorato en botellas y latas, e indica que todos los productos afectados proceden de la planta productora de Bélgica y afecta a varios de los productos de la marca. De momento, esta medida ha afectado a lotes de Coca-Cola, Fanta, Sprite, Minute Maid y Fuze Tea distribuidos en Bélgica, Países Bajos, Alemania, Reino Unido, Francia y Luxemburgo.
Coca-Cola Europacific Partners Belgium ha informado de que los productos que se han retirado son aquellos cuyos códigos de producción van desde el 328 GE hasta el 338 GE. “No tenemos una cifra precisa, pero está claro que es una cantidad considerable”, han afirmado responsables de la firma sobre la cantidad de bebidas involucradas. “La mayoría de los productos afectados y no vendidos ya han sido retirados de los estantes de las tiendas y continuamos tomando medidas para retirar todos los productos restantes del mercado”, añaden en declaraciones a la agencia AFP recogidas por el periódico Le Monde.
Qué es el clorato y por qué puede ser perjudicial para la salud
El clorato es un compuesto químico derivado del ácido clórico que se genera como subproducto del uso de desinfectantes a base de cloro en el tratamiento del agua potable y en procesos industriales, incluida la industria alimentaria y que puede ser perjudicial para la salud si se ingiere o inhala en grandes cantidades.
Puede provocar entonces problemas como irritación en la nariz o la garganta o molestias digestivas. Al introducirse en el torrente sanguíneo también puede influir en el transporte de oxígeno en la sangre y causar dificultades respiratorias. Además, una exposición prolongada al clorato se ha relacionado con interferencias en la función tiroidea.
De hecho, en 2015, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) advirtió que la exposición prolongada al clorato a través de los alimentos podría constituir un riesgo para la salud, especialmente en menores con deficiencia de yodo, ya que inhibe su absorción y puede interferir en la función tiroidea, afectando el desarrollo infantil y el metabolismo. Debido a estos riesgos, la Unión Europea ha prohibido su uso en plaguicidas y biocidas, aunque sigue detectándose en algunos alimentos debido a la contaminación del agua, el suelo o los fertilizantes.
Actualizado: 31 de enero de 2025