El 40% de los niños españoles podrían padecer disfagia en algún momento
12/12/2024
La disfagia es un problema de salud que se caracteriza por dificultades para deglutir los alimentos y que si no se detecta y trata adecuadamente puede interferir con la alimentación y provocar desnutrición o deshidratación. Además, los afectados, corren un importante riesgo de atragantarse.
Cada 12 de diciembre tiene lugar el Día Mundial de la Disfagia y por este motivo la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) ha querido concienciar sobre este trastorno y recordar lo importante que es identificarlo a tiempo, ya que en España hay dos millones de personas con disfagia, pero solo se diagnostican el 10% de los casos, por lo que el 90% restante no se alimenta adecuadamente.
Los expertos de la SEORL-CCC también han advertido que el 40% de los niños españoles pueden llegar a padecer disfagia en algún momento de su vida. En los últimos años ha aumentado el número de casos de disfagia infantil debido a la mejora de las tasas de supervivencia de niños con afecciones complejas que ha permitido que un mayor número de pacientes pediátricos sobrevivan a enfermedades graves, pero que con frecuencia presenten complicaciones adicionales como la disfagia.
70% de los niños con trastornos neurológicos padecen disfagia
Determinados síndromes y patologías que afectan en la edad pediátrica y neonatal conllevan una serie de alteraciones fisiológicas o anatómicas que pueden desencadenar disfagia. Por ejemplo, se estima que la prevalencia de disfagia en niños con trastornos del desarrollo se situaría en el 30-80%, y en el 19,2-99% en niños con parálisis cerebral.
La irritabilidad, la pérdida de apetito y la falta de aumento de peso son síntomas comunes de disfagia en los niños
De hecho, el 70% de los niños españoles con trastornos neurológicos padecen disfagia, un grave problema que afecta significativamente a su capacidad para tragar. El perfil de paciente pediátrico con disfagia muestra que 2 de cada 10 padecen patologías digestivas, mientras que 1 de cada 10 sufre enfermedades respiratorias asociadas.
Los síntomas de disfagia en los niños varían en función de su edad. En los lactantes y niños pequeños, incluyen dificultad para succionar, tragar o masticar, tos o asfixia durante la alimentación, regurgitación frecuente y el rechazo a ciertos alimentos. En niños mayores, los síntomas pueden incluir quejas sobre dolor o malestar al tragar, dificultad para masticar alimentos sólidos y la aparición de neumonías recurrentes debido a la aspiración. Además, la irritabilidad, la pérdida de apetito y la falta de aumento de peso son comunes en ambos grupos de edad.
Actualizado: 12 de diciembre de 2024