El almidón resistente podría ayudar a prevenir tumores hereditarios
29/07/2022
El síndrome de Lynch es una enfermedad que se debe a la alteración de un gen y que se caracteriza por una predisposición genética a desarrollar cáncer colorrectal hereditario y también aumenta el riesgo de padecer otros tipos de cáncer. Ahora, un nuevo ensayo clínico en el que han participado 918 pacientes con síndrome de Lynch –que a causa de ello tenían un elevado riesgo hereditario de diferentes cánceres– ha demostrado que el almidón resistente –que se encuentra en alimentos como los plátanos un poco verdes o la avena, entre otros– ayuda a prevenir la aparición de cáncer.
En el estudio –denominado CAPP2– se ha comprobado que ingerir una dosis regular de almidón resistente (en forma de polvo) durante un promedio de dos años no afectaba a los cánceres en el intestino, pero disminuyó la presencia de cáncer en otras zonas del organismo más de la mitad, algo que se apreció sobre todo en el caso de los cánceres gastrointestinales superiores, incluidos los cánceres de esófago, gástrico, vías biliares, páncreas y duodeno. Además, su efecto se mantenía 10 años después de dejar de tomar el suplemento.
La investigación ha sido dirigida por científicos de la Universidad de Newcastle y la Universidad de Leeds y se ha publicado en Cancer Prevention Research, una revista de la Asociación Estadounidense para la Investigación del Cáncer. “Descubrimos que el almidón resistente reduce una variedad de cánceres en más del 60%. El efecto fue más evidente en la parte superior del intestino”, ha explicado John Mathers, profesor de Nutrición Humana en la Universidad de Newcastle. “Esto es importante ya que los cánceres del tracto gastrointestinal superior son difíciles de diagnosticar y, a menudo, no se detectan a tiempo”.
Dosis de almidón resistente equivalente a comer un plátano diario
El almidón resistente, que también se conoce como fibra fermentable, se puede encontrar también en cereales para el desayuno, pasta y arroz cocidos y enfriados, guisantes y frijoles. “El almidón resistente se puede tomar como un suplemento en polvo y se encuentra de forma natural en los guisantes, los frijoles, la avena y otros alimentos ricos en almidón. La dosis utilizada en el ensayo es equivalente a comer un plátano diario; antes de que se vuelvan demasiado maduros y blandos, el almidón de los plátanos se resiste a la descomposición y llega al intestino, donde puede cambiar el tipo de bacteria que vive allí”.
“Creemos que el almidón resistente puede reducir el desarrollo del cáncer al cambiar el metabolismo bacteriano de los ácidos biliares y reducir los que pueden dañar nuestro ADN y causar cáncer”
“El almidón resistente es un tipo de carbohidrato que no se digiere en el intestino delgado, sino que se fermenta en el intestino grueso y alimenta a las bacterias intestinales beneficiosas; en efecto, actúa como la fibra dietética en el sistema digestivo. Este tipo de almidón tiene varios beneficios para la salud y menos calorías que el almidón normal. Creemos que el almidón resistente puede reducir el desarrollo del cáncer al cambiar el metabolismo bacteriano de los ácidos biliares y reducir esos tipos de ácidos biliares que pueden dañar nuestro ADN y eventualmente causar cáncer. Sin embargo, esto necesita más investigación”.
Aspirina o almidón para reducir el riesgo de cáncer
Entre los años 1999 y 2005 los participantes en el estudio empezaron a tomar almidón resistente en forma de polvo a diario o aspirina, o un placebo (un polvo de aspecto similar al almidón resistente pero inactivo) durante dos años. Al finalizar el periodo de tratamiento, no se encontraron diferencias entre los que habían tomado aspirina o almidón resistente y los que no.
Sin embargo, los investigadores previeron un efecto a más largo plazo y diseñaron el estudio para realizar un seguimiento posterior. Durante la fase de seguimiento, solo se produjeron cinco nuevos casos de cánceres gastrointestinales superiores entre los 463 participantes que habían tomado el almidón resistente, en comparación con 21 entre los 455 a los que se administró el placebo. Investigaciones anteriores que se han pblicado como parte del mismo ensayo mostraron que la aspirina redujo el cáncer del intestino grueso en un 50%.
El profesor Sir John Burn, de la Newcastle University y Newcastle Hospitals NHS Foundation Trust, que dirigió el ensayo con el profesor Mathers, ha señalado: “Cuando comenzamos los estudios hace más de 20 años, pensamos que las personas con una predisposición genética al cáncer de colon podrían ayudarnos a probar si podríamos reducir el riesgo de cáncer con aspirina o almidón resistente”.
“Los pacientes con síndrome de Lynch tienen un alto riesgo, ya que tienen más probabilidades de desarrollar cánceres, por lo que es de vital importancia descubrir que la aspirina puede reducir a la mitad el riesgo de cánceres de intestino grueso y otros tipos de cánceres resistentes al almidón”.
El profesor Tim Bishop, de la Universidad de Leeds, que también dirigió el trabajo concluye que “los resultados son emocionantes, pero la magnitud del efecto protector en el tracto gastrointestinal superior fue inesperada, por lo que se requiere más investigación para replicar estos hallazgos”. Actualmente, el equipo de científicos dirige el ensayo internacional CaPP3, en el que participan más de 1,800 personas con síndrome de Lynch en las que se va a evaluar la posibilidad de emplear dosis más pequeñas y seguras de aspirina para ayudar a reducir el riesgo de cáncer.
Actualizado: 5 de mayo de 2023