Hallan el secreto que vincula una dieta alta en grasas con el alzhéimer
25/04/2024
Un equipo de investigadores liderado por la Universidad Rovira i Virgili (URV) ha identificado un vínculo entre el consumo de alimentos altos en grasas saturadas y el desarrollo del alzhéimer. El hallazgo es el resultado de un estudio que se enfocó en cómo afecta esta dieta a ciertas moléculas presentes en la sangre y otros tejidos, incluido el cerebro, que funcionan como indicadores y moduladores de la enfermedad.
El estudio utilizó un modelo de ratones que desarrollan alzhéimer en la adultez. Investigaciones anteriores ya habían mostrado que una dieta alta en grasas llevaba a estos animales a desarrollar la enfermedad mucho antes en comparación con aquellos que seguían una dieta estándar. Sin embargo, los mecanismos que aceleraban la progresión de la enfermedad no estaban claros hasta ahora.
La dirección del estudio estuvo a cargo de Mònica Bulló, profesora catedrática del Departamento de Bioquímica y Biotecnología y miembro del grupo de investigación Nutrición y Salud Metabólica (NuMeH) y del Centro de Tecnología Ambiental, Alimentaria y Toxicológica (TecnATox) de la URV. Este trabajo se realizó en colaboración con el Instituto de Investigación Sanitaria Pere Virgili (IISPV), el CIBERobn y la Universidad de Barcelona, y los resultados se han publicado en la revista Nutrients.
Estrategias dietéticas que ayuden a prevenir o tratar el alzhéimer
Los investigadores examinaron la expresión de 15 microARNs (miARNs), que son pequeñas moléculas de ARN esenciales para la regulación genética, tanto en plasma como en tejido cerebral. Analizaron las alteraciones de los microARNs vinculados a la insulina en ratones predispuestos al alzhéimer y sometidos a una dieta alta en grasas saturadas.
“Los resultados del estudio suponen un avance en el conocimiento del mecanismo que explicaría la relación entre la obesidad, la diabetes tipo 2 y el desarrollo del alzhéimer”
Los hallazgos revelaron que la dieta afectaba negativamente a su metabolismo, lo que se manifestaba con un aumento significativo en el peso corporal y una reducida capacidad de respuesta a la glucosa y la insulina, características parecidas a las que presentan la obesidad y la diabetes tipo 2 en los humanos. Además, se detectó una alteración en varios microARNs, tanto en la sangre, como en el cerebro. Estos cambios están asociados a procesos que pueden perjudicar al cerebro, como la acumulación de placas de β-amiloide, la producción descontrolada de ciertas proteínas que pueden dañar células cerebrales y la inflamación cerebral, también relacionada con el alzhéimer.
La investigadora Mònica Bulló ha destacado que “los resultados obtenidos en este estudio suponen un avance en el conocimiento del mecanismo que explicaría la relación entre la obesidad, la diabetes tipo 2 y el desarrollo del alzhéimer. Además, ofrecen nuevas dianas para la posible prevención y tratamiento de la enfermedad”.
Este trabajo no solo aporta información valiosa sobre cómo una dieta rica en grasas puede comprometer la salud cerebral, sino que también sugiere futuras líneas de investigación sobre estrategias dietéticas como posible tratamiento para el alzhéimer. Los resultados enfatizan la importancia de mantener una dieta equilibrada para prevenir enfermedades neurodegenerativas y resaltan el rol de los microARN como dianas para intervenciones terapéuticas.
Fuente: Universidad Rovira i Virgili (URV)
Actualizado: 25 de abril de 2024