La kombucha imita al ayuno y podría reducir la acumulación de grasas

La kombucha es una bebida de té fermentado y endulzado que se ha vuelto muy popular, en parte debido a sus supuestos beneficios para la salud, como la reducción de la presión arterial, o la protección contra enfermedades metabólicas y toxinas hepáticas. Se cree que estos beneficios provienen de los microbios probióticos de la bebida y su impacto en el metabolismo, aunque las propiedades saludables que se le atribuyen no han sido extensamente estudiadas en humanos.

Un estudio reciente, sin embargo, ha revelado que los microbios presentes en el té de kombucha inducen cambios en el metabolismo de las grasas en los intestinos de un tipo de gusano –el C. elegans– que son similares a los efectos producidos por el ayuno. La investigación ha sido llevada a cabo por Robert Dowen y su equipo de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, que han publicado sus hallazgos en la revista PLOS Genetics.

Los investigadores analizaron el efecto de los probióticos del té de kombucha en el metabolismo alimentando a los nematodos modelo C. elegans con estos microbios. Los investigadores observaron que las levaduras y bacterias colonizan los intestinos de los gusanos y generan cambios metabólicos parecidos a los que suceden durante el ayuno.

La kombucha induce mejoras en el metabolismo de las grasas

Los microbios modifican la expresión de genes relacionados con el metabolismo de las grasas, lo que tiene como resultado un aumento de proteínas que descomponen las grasas y una disminución de proteínas que producen moléculas de grasa llamadas triglicéridos. En conjunto, estos cambios reducen las reservas de grasa en los gusanos. Los resultados del estudio ofrecen una nueva comprensión de cómo los probióticos presentes en el té de kombucha pueden remodelar el metabolismo en una especie de gusano modelo, y sugieren cómo estos microbios podrían afectar el metabolismo humano.

“Los hallazgos sugieren que los microbios en el té de kombucha inducen un estado similar al ayuno en el huésped, incluso en presencia de suficientes nutrientes”

Aunque es muy importante recordar que se necesita más investigación para demostrar que el consumo de kombucha produce en las personas efectos similares a los observados en el modelo de C. elegans estudiado aquí, estos hallazgos parecen consistentes con los beneficios reportados de la kombucha para la salud humana, afirman los autores, y podrían apoyar el uso de la bebida en enfoques complementarios de atención médica en el futuro.

“Nos sorprendió descubrir que los animales que consumían una dieta compuesta por los microbios probióticos encontrados en el té de kombucha mostraban una acumulación de grasa reducida, niveles más bajos de triglicéridos y gotas de lípidos más pequeñas –un orgánulo que almacena los lípidos de la célula– en comparación con otras dietas. Estos hallazgos sugieren que los microbios en el té de kombucha inducen un estado similar al ayuno en el huésped, incluso en presencia de suficientes nutrientes”, concluyen los autores.