La kombucha de té verde mejora síntomas digestivos en personas con sobrepeso

La kombucha es una bebida fermentada con propiedades probióticas a la que se atribuyen beneficios para la salud en general y, específicamente, para la microbiota intestinal (conjunto de microorganismos como bacterias, virus, hongos, etcétera que pueblan nuestro intestino), ya que favorece su equilibrio y esto repercute en un mejor funcionamiento de todo el organismo.

La kombucha se prepara mezclando té verde o negro con azúcar y un producto simbiótico de bacterias y levaduras que se conoce como SCOBY (siglas en inglés de Colonia Simbiótica de Bacterias y Levaduras) u hongo kombucha. Durante el proceso se generan compuestos bioactivos como ácidos fenólicos, ácidos orgánicos y vitaminas.

Un ensayo clínico ha revelado ahora que el consumo de té verde kombucha “mejora la mayoría de los síntomas gastrointestinales en individuos con exceso de peso corporal sometidos a un tratamiento de pérdida de peso, ayudando principalmente en la sensación de vaciado completo del intestino y heces duras, algo importante para la función óptima y la motilidad del intestino”, según han explicado sus autores en un artículo publicado en la revista Foods.

La kombucha mejora la salud metabólica de personas con sobrepeso

Las personas con sobrepeso suelen presentar un microbioma intestinal alterado, menor diversidad microbiana y una barrera intestinal debilitada, factores que contribuyen a la inflamación y al desarrollo de trastornos metabólicos. Estudios previos realizados en modelos animales habían mostrado que la kombucha podría reducir la disbiosis intestinal y mejorar la salud intestinal.

Esta investigación evaluó por primera vez los efectos del té verde kombucha en síntomas gastrointestinales, permeabilidad intestinal, composición de la microbiota y metabolitos séricos en personas con sobrepeso que seguían un tratamiento para adelgazar. El estudio incluyó a participantes con exceso de peso (índice de masa corporal ≥ 27 kg/m² y porcentaje de grasa corporal > 30% en mujeres y > 25% en hombres), que fueron divididos en dos grupos al azar: un grupo de control que siguió una dieta saludable baja en calorías, y un grupo de kombucha que, además de la misma dieta, consumió 200 mL diarios de té verde kombucha durante 10 semanas.

En el grupo que tomó kombucha se encontraron metabolitos asociados con propiedades antiobesidad, antiinflamatorias y antioxidantes que pueden mejorar la salud de las personas con sobrepeso

Entre los criterios de exclusión estaban la presencia de enfermedades metabólicas o crónicas, el consumo habitual de suplementos o alimentos fermentados, y el consumo frecuente de té. El té verde kombucha empleado se preparó de forma casera y tenía un contenido probiótico de mil millones de unidades formadoras de colonias por porción.

Aunque los investigadores no observaron cambios significativos en la composición de la microbiota, ni en la permeabilidad intestinal, el consumo de esta bebida mejoró los síntomas gastrointestinales y modificó el metaboloma sérico, influyendo en metabolitos relacionados con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

“Otro resultado importante fue el empeoramiento de los marcadores de permeabilidad intestinal y el pH fecal solo en el grupo de control, lo que sugiere que la ingesta de kombucha podría prevenir parcialmente estos efectos negativos”, afirman los investigadores, que añaden que el consumo de té verde kombucha afectó al metaboloma sérico y que “algunos de los metabolitos que se encuentran estrictamente en el grupo del kombucha están relacionados con propiedades antiobesidad, antiinflamatorias y antioxidantes que pueden mejorar la salud general de las personas con exceso de peso corporal”. Por ello, consideran que los resultados sugieren posibles beneficios para la salud metabólica en personas con sobrepeso.