Nutrientes de la dieta mediterránea frenan el envejecimiento del cerebro
22/05/2024
Nuestra alimentación resulta clave para mantenernos saludables y esto incluye al cerebro. En una sociedad cada vez más envejecida proteger la salud cerebral es fundamental para reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas que provocan discapacidad y reducen la calidad de vida. Ahora, una nueva investigación ha identificado un perfil nutricional específico en los participantes que mostraron un mejor rendimiento cognitivo, lo que podría ayudar a desarrollar estrategias preventivas y terapéuticas basadas en la dieta.
El nuevo estudio ha sido realizado por un equipo de científicos liderado por Aron Barbey, director del Centro de Cerebro, Biología y Comportamiento de la Universidad de Nebraska, junto a Jisheng Wu, estudiante de doctorado en Nebraska, y Christopher Zwilling, investigador en UIUC, que combinaron innovaciones avanzadas en neurociencia y ciencia nutricional para analizar a 100 individuos cognitivamente sanos, de entre 65 y 75 años.
Los participantes completaron un cuestionario con información demográfica, mediciones corporales y actividad física. Se recolectaron muestras de plasma sanguíneo después de un periodo de ayuno para analizar los biomarcadores nutricionales. Estas personas también se sometieron a evaluaciones cognitivas y resonancias magnéticas. Los resultados revelaron dos tipos de envejecimiento cerebral entre los participantes: acelerado y más lento de lo esperado. Aquellos con un envejecimiento cerebral más lento presentaban un perfil nutricional distintivo.
Los biomarcadores sanguíneos beneficiosos incluían una combinación de ácidos grasos (ácidos vaccénico, gondoico, alfa-linolénico, eicosapentaenoico, eicosadienoico y lignocérico); antioxidantes y carotenoides como cis-luteína, trans-luteína y zeaxantina; dos formas de vitamina E y colina. Este perfil se correlaciona con nutrientes presentes en la dieta mediterránea, la cual investigaciones previas han asociado con un envejecimiento cerebral saludable.
“Investigamos biomarcadores nutricionales específicos, como perfiles de ácidos grasos, conocidos en la ciencia de la nutrición por ofrecer potenciales beneficios para la salud. Esto se alinea con un amplio cuerpo de investigación que demuestra los efectos positivos de la dieta mediterránea, que enfatiza alimentos ricos en estos nutrientes beneficiosos”, dijo Barbey, profesor Mildred Francis Thompson de Psicología. “El estudio actual identifica patrones de biomarcadores nutricionales particulares que son prometedores y tienen asociaciones favorables con medidas de rendimiento cognitivo y salud cerebral”.
Habilidades cognitivas directamente vinculadas a la dieta y la nutrición
Barbey señaló que investigaciones previas sobre nutrición y envejecimiento cerebral se basaban principalmente en cuestionarios de frecuencia alimentaria, dependientes del recuerdo de los participantes. Este estudio es uno de los primeros y más grandes en combinar imágenes cerebrales, biomarcadores sanguíneos y evaluaciones cognitivas validadas.
“El aspecto único de nuestro estudio radica en su enfoque integral, integrando datos sobre nutrición, función cognitiva e imágenes cerebrales”, comentó Barbey. “Esto nos permite construir una comprensión más sólida de la relación entre estos factores. Vamos más allá de simplemente medir el rendimiento cognitivo con pruebas neuropsicológicas tradicionales. En su lugar, examinamos simultáneamente la estructura, función y metabolismo del cerebro, demostrando un vínculo directo entre estas propiedades cerebrales y las habilidades cognitivas. Además, mostramos que estas propiedades cerebrales están directamente vinculadas a la dieta y la nutrición, como lo revelan los patrones observados en los biomarcadores nutricionales”.
“El estudio actual identifica patrones de biomarcadores nutricionales particulares que son prometedores y tienen asociaciones favorables con medidas de rendimiento cognitivo y salud cerebral”
Los científicos han estudiado el cerebro durante mucho tiempo con el objetivo de ayudar a un envejecimiento más saludable. Aunque se conoce mucho sobre los factores de riesgo para el envejecimiento cerebral acelerado, se ha descubierto menos sobre cómo prevenir el deterioro cognitivo. Hay evidencia de que la nutrición importa, y un nuevo estudio del Centro de Cerebro, Biología y Comportamiento de la Universidad de Nebraska-Lincoln y la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign señala aún más cómo nutrientes específicos pueden desempeñar un papel clave en el envejecimiento saludable del cerebro. Los hallazgos se publicaron en Nature Publishing Group Aging.
Los investigadores continuarán explorando este perfil nutricional en relación con el envejecimiento saludable del cerebro. Barbey mencionó que es posible que, en el futuro, los hallazgos ayuden a desarrollar terapias e intervenciones para promover la salud cerebral. “Un próximo paso importante implica la realización de ensayos controlados aleatorios. En estos ensayos, aislaremos nutrientes específicos con asociaciones favorables con la función cognitiva y la salud cerebral, y los administraremos en forma de nutracéuticos”, explicó Barbey. “Esto nos permitirá evaluar de manera definitiva si aumentar los niveles de estos perfiles nutricionales específicos conduce de manera confiable a mejoras en el rendimiento de las pruebas cognitivas y en las medidas de estructura, función y metabolismo cerebral”.
“Existe un enorme interés científico y médico en comprender el profundo impacto de la nutrición en la salud cerebral”, añade Barbey. “Reconociendo esto, los Institutos Nacionales de Salud lanzaron recientemente un plan estratégico de 10 años para acelerar significativamente la investigación en nutrición. Nuestro trabajo se alinea directamente con esta iniciativa crítica, con el objetivo de contribuir con valiosos conocimientos sobre cómo los patrones dietéticos influyen en la salud cerebral y la función cognitiva”, concluye el experto.
Actualizado: 22 de mayo de 2024