El ciclismo no afecta a la función urinaria ni sexual de los hombres
19/01/2018
Los hombres que practican ciclismo, ya sea de manera amateur o profesional, no ven dañada su salud sexual ni su función urinaria como se creía. Así lo confirman los resultados de una investigación publicada en The Journal of Urology, que contradice a algunos estudios anteriores que indicaban que la posición que se adopta en la bicicleta puede causar presión en el aparato reproductor masculino y provocarle disfunciones.
El nuevo trabajo ha sido realizado por un grupo de expertos de la Universidad de California San Francisco (UCSF), en Estados Unidos, que analizaron la salud sexual de 2.774 ciclistas, 789 corredores y 539 nadadores, repartidos por Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Reino Unido. Los participantes contestaron unos test que recogían información sobre su función sexual y urinaria, y sobre los posibles problemas de infecciones, entumecimiento, estenosis uretrales –estrechamiento de la uretra– y dolores en la zona.
Los ciclistas pueden prevenir el entumecimiento genital pedaleando de pie el 20% del trayecto
Los resultados fueron similares en todos los participantes con independencia del ejercicio que realizaran, lo que demuestra que no existe un riesgo mayor en los hombres que montan en bicicleta, como señalaban otros estudios. Benjamin Breyer, principal investigador, ha explicado que los beneficios de este tipo de deporte superan los riesgos, ya que mejora la salud cardiovascular y apenas repercute negativamente en las articulaciones.
Más entumecimiento genital entre los ciclistas
Sin embargo, sí que se observaron diferencias en algunos aspectos de los deportistas. Algunos ciclistas tenían mayor propensión a presentar estenosis uretral y, sobre todo, entumecimiento genital. Este último trastorno lo siguen estudiando para comprobar si podría desencadenar otros problemas, aunque subrayan que se puede reducir significativamente si se pedalea de pie el 20% del tiempo que se pasa sobre la bicicleta.
En el estudio también se tuvieron en cuenta otros aspectos del ciclismo, como el tipo de bicicleta utilizada, la altura del sillín y del manillar, el uso de ropa con refuerzo en la zona genital, o el tipo de terreno por el que se circula, pero ninguno parecía tener efectos negativos sobre los hombres.
Además, se diferenció entre los que realizaban el ejercicio de manera más intensa (más de dos veces por semana durante al menos dos años y con una media de 40 km diarios recorridos) y los que montaban en bicicleta de forma recreativa, y tampoco se observaron diferencias significativas entre estos dos grupos, excepto que los ciclistas de alta intensidad tenían una mejor función sexual.
Actualizado: 4 de mayo de 2023