La distancia social entre corredores o en bicicleta deberá ser mayor

Mientras en países como Francia o Bélgica sigue estando permitido pasear, correr, montar en bicicleta, o realizar otro tipo de ejercicio físico al aire libre, entre las medidas adoptadas en España para frenar la propagación del coronavirus está la prohibición de salir de casa excepto para los casos contemplados como estrictamente necesarios y siempre manteniendo una distancia de seguridad de aproximadamente dos metros, como tener que desplazarse al lugar de trabajo por no poder teletrabajar, o acudir a un supermercado o farmacia a adquirir productos de primera necesidad. Lo que está claro es que el coronavirus ha cambiado nuestras vidas para siempre, y parece que también la manera de practicar deporte o ir al trabajo.

A medida que se levanten las estrictas medidas de confinamiento adoptadas en nuestro país es muy probable que se permita hacer deporte en el exterior, y por ello es importante conocer cuál es el riesgo de contraer el COVID-19 al practicar actividad física al aire libre y cómo prevenirlo, teniendo en cuenta que muchas personas lo harán al mismo tiempo en cuanto se levante la veda.

Las partículas que expulsan los deportistas permanecen unos segundos en el aire, por lo que el que viene detrás se expone a contraer la infección por coronavirus

Para averiguarlo, investigadores de la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) y la Universidad Politécnica de Eindhoven (Países Bajos) han realizado un estudio preliminar –que aún no se ha publicado– que muestra la necesidad de mantener una distancia mínima de seguridad de cinco metros entre corredores o ciclistas, en general cualquier individuo que se encuentre en el exterior.

Según advierten, los dos metros aconsejados hasta ahora no son suficientes porque esta separación solo es eficaz si las personas están paradas o hace poco viento, pero es demasiado escasa si realizan ejercicio, ya que al caminar, correr, o montar en bicicleta, se incrementa la probabilidad de contagiarse del SARS-CoV-2 porque el deportista respira, estornuda o tose a mayor velocidad que una persona quieta, y las partículas que expulsa permanecen unos segundos en el aire, por lo que el que viene detrás se expone a la infección aunque no esté cerca.

En movimiento las partículas virales se expulsan con más fuerza

Los investigadores llevaron a cabo una simulación de la expulsión de partículas de individuos en movimiento y desde diferentes ángulos –en paralelo, en diagonal y por detrás–, y animaciones recreadas de personas mientras practican ejercicio y las partículas que expulsan al toser, estornudar o escupir mientras se realiza deporte. Las que tienen un diámetro inferior se marcan en color azul, y en rojo las más pesadas, que caen antes al suelo, aunque todas pueden provocar el contagio.

Aconsejan que si mientras corres te encuentras con otra persona delante, te muevas hacia un lado hasta comprobar que su cuerpo no bloquea tu visión

El Dr. Bert Blocken, especialista en física urbana, ingeniería eólica y aerodinámica deportiva, y uno de los autores del trabajo, ha explicado que al toser o estornudar las personas esparcen gotas con mayor fuerza, pero incluso al respirar también se deja una estela de partículas en suspensión, por lo que al encontrarse dos personas mientras caminan o corren el riesgo de contagio es menor si ambas están de lado o en diagonal, que si hace mucho viento o siguen la misa línea al correr.

De acuerdo con sus hallazgos, estos científicos aconsejan que se mantenga una distancia de seguridad de 4-5 metros como mínimo en caso de caminar, de 10 metros al hacer running o pasear en bicicleta, y de 20 metros si se practica ciclismo a una velocidad moderada-alta, y que si se adelanta a alguien se haga a la mayor distancia posible. Blocken añade que si mientras corres te encuentras con otra persona delante, te muevas hacia un lado hasta comprobar que su cuerpo no bloquea tu visión.

Desde algunos gobiernos, como el francés o el de la ciudad de Teherán (Irán), están proponiendo estos días que se adopten medidas para implementar la bicicleta como medio de transporte para desplazarse al lugar de trabajo por considerar que es una fórmula ideal para mantener el distanciamiento social, algo imposible de conseguir en el transporte público si se retoma la normalidad. La propia ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, manifestaba hace unos días en Twitter su apoyo a este tipo de medidas de movilidad. Y el alcalde de Madrid acaba de anunciar que la capital reabrirá la próxima semana el servicio de Bicimad, tras haber reestablecido los protocolos de desinfección de las bicicletas.