Los jóvenes obesos y en baja forma, abocados a una jubilación temprana
13/02/2019
La salud durante la edad adulta puede estar determinada por ciertos factores en la adolescencia, según un estudio realizado por la Universidad de Granada (UGR) en colaboración con el Instituto Karolinska de Suecia, que ha revelado que los adolescentes que tienen obesidad o están en baja forma física, o presentan ambos problemas, tienen un mayor riesgo de depender de una pensión de invalidez temprana en el futuro a consecuencia del desarrollo de una enfermedad incapacitante.
La investigación ha contado con la participación de más de un millón de chicos adolescentes de Suecia que tuvieron un seguimiento de unos 30 años. Los resultados, publicados en la revista Annals of Internal Medicine, mostraron que tanto hacer poco ejercicio físico, como tener obesidad en la adolescencia, son factores de riesgo para tener que optar por una jubilación temprana asociada a una situación de incapacidad, independientemente de que se deba a otras enfermedades crónicas o severas, como problemas cardiovasculares o musculoesqueléticos, o trastornos psiquiátricos o del sistema nervioso.
Las enfermedades mentales, entre las más frecuentes
Entre las enfermedades que provocaron el abandono precoz de la actividad laboral en los participantes, las de tipo psiquiátrico fueron las más numerosas. Es más, Pontus Henriksson, uno de los autores de este trabajo, destaca que han encontrado que el riesgo de tener una pensión por un problema psiquiátrico en un individuo con una muy baja capacidad aeróbica es mayor que en uno con obesidad mórbida.
Los obesos con una capacidad aeróbica moderada o alta tuvieron menos riesgo de sufrir una enfermedad psiquiátrica que desemboque en una jubilación temprana
Además, aquellos que presentaban obesidad pero una capacidad aeróbica moderada o alta –la controversia del fat but fit o fofisano–, tenían menos probabilidades de padecer una enfermedad psiquiátrica que desemboque en una jubilación temprana, en comparación con los que tenían un peso normal pero capacidad aeróbica deficiente. Esto indica que es importante hacer ejercicio físico aunque se esté delgado, porque el hecho de que una persona tenga un peso normal no significa necesariamente que esté sana.
Francisco B. Ortega, otro de los autores, afirma que mantener una buena condición física no solo conlleva beneficios para la salud, sino que también tiene una repercusión positiva en la sociedad y en la economía del país, sobre todo teniendo en cuenta el aumento de la esperanza de vida.
Aunque este estudio tiene limitaciones –solo está realizado en varones–, los investigadores instan a que la población adolescente practique ejercicio de forma habitual y lleve una dieta variada en esta etapa, pues aunque el componente genético de enfermedades como la hipertensión arterial o la hipercolesterolemia sea importante, los factores de riesgo modificables se pueden eliminar o reducir con un estilo de vida saludable.
Actualizado: 4 de mayo de 2023