Una buena forma física en la infancia mejora la salud pulmonar
16/02/2018
Una mejoría de la forma física durante la infancia y la adolescencia se ha asociado a un mayor volumen pulmonar y una mejor salud de estos órganos durante la etapa adulta, en un estudio llevado a cabo por dos investigadores; uno de la Universidad de Otago (Nueva Zelanda), y otro de la Universidad Near East (Chipre), que han tenido como base otros dos trabajos realizados con anterioridad.
El interés de los autores de la investigación, que ha sido publicada en la European Respiratory Journal, era conocer la capacidad máxima de ejercicio de los participantes de los dos trabajos de base, su volumen espiratorio forzado en el primer segundo (FEV1) –que mide la cantidad de aire que se expulsa durante un segundo después de haber inspirado la mayor cantidad posible–, la capacidad vital forzada (FVC) –la facultad máxima de captar y expulsar aire–, y la relación entre ambas, para poder obtener conclusiones.
Uno de los estudios, llamado Odense, analizó a 1.369 niños desde los nueve años hasta los 29, a los que les realizaron espirometrías (con las que se mide el aire que es capaz de inspirar y espirar una persona) a los 9, 15, 21 y 29 años, así como pruebas para averiguar la capacidad máxima de ejercicio en esas edades.
Trabajar en la mejora del estado físico de los niños y adolescentes aumenta su volumen pulmonar durante la etapa adulta, lo que puede reducir el riesgo de mortalidad
La otra investigación, denominada Dunedin, hizo un seguimiento a 1.037 individuos desde los nueve hasta los 38 años, a los que se les realizaron las mismas pruebas que en el anterior estudio, y en el mismo intervalo de tiempo. Además, también se les practicaron pruebas de aptitud aeróbica a los 15, 26, 32 y 38 años.
Mejoría más notable de la capacidad pulmonar en hombres
Los resultados mostraron que la capacidad aeróbica fue asociada de manera positiva con FEV1 y FVC en todas las edades. También se observó que un cambio positivo en las condiciones físicas de los menores provocó un aumento del 2% y 3% del FEV1 y FVC en la etapa adulta, sobre todo en el caso de los varones. Aunque esta asociación resultó mínima en la adultez tardía o en la tercera edad, los autores afirman que trabajar en la mejora del estado físico de los niños y adolescentes aumenta su volumen pulmonar durante la etapa adulta, lo que puede reducir el riesgo de mortalidad, añaden.
Aunque el estudio no se ha centrado en las causas de esta relación, y se necesitan más estudios para corroborar estos hallazgos, algunos doctores sí han avanzado algunas hipótesis sobre el motivo de esta mejora en los pulmones. La explicación más simple que le atribuyen es que la inspiración y espiración fortalecen los músculos respiratorios; mientras que la más técnica sugiere que las funciones pulmonares extremas son un estímulo fisiológico para la producción de surfactante, una sustancia que reduce la tensión alveolar.
Actualizado: 4 de mayo de 2023