Tener diabetes gestacional durante el embarazo aumenta el riesgo de obesidad infantil en el futuro del bebé, una conclusión a la que ya habían llegado varios estudios realizados en los últimos años, y ahora, una nueva investigación que se ha dado a conocer este mes, ha relacionado la diabetes gestacional con tres indicadores de obesidad infantil en los hijos de las embarazadas del estudio: el Índice de Masa Corporal (IMC), la adiposidad abdominal, y el perímetro de la cintura.
El Estudio Internacional de la Obesidad en la Infancia, Estilo de vida y el Entorno (ISCOLE), que ha sido publicado en la revista Diabetología, es el primero que incluye países con ingresos medios y bajos. La investigación se realizó con poco menos de 5.000 niños de edades coprendidas entre los 9 y los 11 años, residentes en países como Brasil, Colombia, Estados Unidos, Canadá, Australia, China, India, Sudáfrica, Kenia, Finlandia, Reino Unido y Portugal. Estos países no cuentan con el mismo porcentaje de casos de diabetes gestacional; por ejemplo, China y Reino Unido tienen un 1,9% de casos, Portugal un 8,8%, y la prevalencia a nivel global es de un 4,3%.
Los hijos de mujeres con diabetes gestacional nacen con una media de peso superior, y tienen más riesgo de sufrir obesidad entre los 9 y los 11 años de edad
En los resultados del trabajo se afirmaba que los bebés nacidos de mujeres que habían tenido diabetes gestacional tenían una prevalencia de obesidad del 18,4%, frente al 12% de los bebés cuyas madres estaban sanas. También se observó que los primeros nacían con una media de peso superior, unos 141 gramos más, y que los datos eran más significativos en los casos de los países con ingresos medios y bajos.
De hecho, se ha relacionado un excesivo crecimiento fetal con la exposición a la diabetes en la gestación. y así lo han señalado los autores del estudio, que han atribuido el aumento de la masa adiposa del feto y la alteración de sus hormonas, a la presencia de esta complicación del embarazo. A su vez, destacan que la diabetes gestacional puede provocar en el bebé un aumento de la hiperglucemia, de los niveles de insulina (hiperinsulinemia), y de la síntesis de la leptina.
