Médicos españoles identifican factores que influyen en el bajo peso al nacer
20/12/2024
Los niños que nacen con un peso inferior a 2,5 kilos pueden padecer problemas de salud durante toda su vida. Según datos de la Organización Mundial de la Salud la prevalencia del bajo peso al nacer se estima en el 15 y el 20% de los recién nacidos a nivel mundial. Este bajo peso puede deberse a un crecimiento intrauterino retardado o a un parto prematuro (el que se produce antes de la semana 37 de embarazo).
PUBLICIDAD
Determinar cuáles son los factores de riesgo que se pueden prevenir durante el embarazo para que el feto se desarrolle correctamente y el bebé nazca con una edad gestacional y un peso adecuados es fundamental para garantizar su bienestar tanto en la infancia, como al llegar a la adultez. Ahora, un nuevo estudio realizado por especialistas del Hospital Clínico San Carlos de Madrid ha mostrado que el perfil genómico de la madre, un buen manejo de la diabetes gestacional y que la embarazada siga una dieta mediterránea previenen el bajo peso al nacer.
La nueva investigación ha sido realizada por un equipo multidisciplinar de investigación de endocrinología en enfermedades metabólicas sobre el perfil genómico de más de 1.600 gestantes y sus resultados se han publicado en la revista IScience. El peso del recién nacido es un indicador básico de la salud fetal estadísticamente asociado a una amplia variedad de complicaciones a largo plazo, como un elevado riesgo de retraso en el crecimiento, un menor coeficiente intelectual, e incluso la posibilidad de muerte prematura, mientras que en la edad adulta se relaciona con un mayor riesgo de sobrepeso, obesidad y morbilidad cardiovascular.
PUBLICIDAD
Con este estudio “pretendemos aumentar el conocimiento sobre el trasfondo genético del bajo peso al nacer mediante el análisis de su asociación con un conjunto de variantes maternas relacionadas con la diabetes mellitus gestacional y la dieta mediterránea”, explica Alfonso Calle Pascual, jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Clínico San Carlos, en una nota publicada por el centro. Para ello –añade– “realizamos un enfoque multifactorial que incluye información genética maternal de 1.642 gestantes, junto con algunas características antropométricas y metabólicas, que se recogen de manera rutinaria en el seguimiento del embarazo”.
La alimentación saludable de la embarazada beneficia a su hijo
Los investigadores han identificado 33 variantes genéticas asociadas con el bajo peso al nacer y permite concluir que la prevención y reducción de la prevalencia del bajo peso al nacer se puede conseguir mediante la observación de ciertos fenotipos maternos y la recomendación a las mujeres embarazadas de llevar una dieta y un estilo de vida saludables, junto con la eventual incorporación del análisis del genoma materno, que contribuya a un seguimiento más personalizado del embarazo.
PUBLICIDAD
Este estudio forma parte de otro en el que endocrinólogos del Hospital Clínico San Carlos ya demostraron en 2020 que tomar dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva virgen extra y pistachos durante el embarazo mejora la salud de las gestantes y de los niños en sus dos primeros años de vida, reduciendo el riesgo de ingresos hospitalarios hasta en un 25%, según el estudio realizado sobre 703 niños que publicaron en el Journal of Clinical Medicine.
Seguir la dieta mediterránea durante el embarazo se asocia a una reducción de ingresos hospitalarios de los hijos hasta los dos años de edad
Los beneficios que proporciona el hecho de evitar el sobrepeso durante el embarazo se trasladan al futuro bebé, ya que los resultados de este estudio confirman que seguir la dieta mediterránea, especialmente en el caso de las mujeres que tienen un índice de masa corporal menor de 25 y un nivel normal de tolerancia a la glucosa durante la gestación, se asocia a una reducción de ingresos hospitalarios de sus hijos hasta los dos años de edad.
PUBLICIDAD
“En los hijos de madres que durante el embarazo tuvieron una alimentación más saludable basada en la dieta mediterránea, complementada con aceite de oliva virgen extra y pistachos como fruto seco, se observó una reducción de los ingresos hospitalarios por causa de bronquiolitis, asma, o enfermedades infecciosas del 25%”, señala Calle Pascual.
El grupo del Clínico San Carlos ya había demostrado anteriormente que una adherencia temprana a la dieta mediterránea con un suplemento de ingesta de aceite de oliva virgen extra y nueces puede reducir el riesgo de diabetes mellitus gestacional y otras consecuencias negativas, además de mejorar el perfil metabólico de la mujer en el postparto.
Fuente: Hospital Clínico San Carlos
Actualizado: 20 de diciembre de 2024