Un análisis de sangre puede predecir la preeclampsia

Medir los niveles de dos proteínas en la sangre puede ayudar a predecir el riesgo de una embarazada a desarrollar preeclampsia en las próximas semanas, según ha descubierto un grupo de investigadores.
Una mujer analiza sangre en el laboratorio

La preeclampsia suele pasar inadvertida para las afectadas porque los síntomas solo se manifiestan en casos graves.

La evaluación de determinados biomarcadores mediante un análisis de sangre podría contribuir de forma eficaz a predecir la aparición de preeclampsia –una grave complicación del embarazo que afecta a madre y bebé, y se considera la segunda causa más común de muerte en gestantes–, según ha comprobado un equipo de científicos de la Clínica de Salud de la Mujer de la Universidad de Viena de Medicina, en Austria.

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Los investigadores han descubierto que si los cocientes de dos proteínas denominadas ‘sFlt-1’ y ‘PIGF’ presentes en la muestra de sangre son menores o igual a 38 no existe riesgo de que la embarazada desarrolle preeclampsia en las próximas semanas, mientras que si dicho cociente es superior a 38 la mujer tiene probabilidades de sufrir la enfermedad en las siguientes cuatro semanas.

En los casos más graves la preeclampsia puede provocar hemorragia cerebral, insuficiencia renal y edema pulmonar

La preeclampsia suele pasar inadvertida para las afectadas porque los síntomas como dolor de cabeza, mareos, aumento de peso debido a la retención de líquidos, náuseas o vómitos…, solo se manifiestan en casos graves, y debidos sobre todo a la hipertensión o a los daños que se hayan podido originar en algunos órganos.

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En los casos más graves la preeclampsia puede provocar hemorragia cerebral, insuficiencia renal y edema pulmonar, de ahí la importancia de contar con una herramienta que permita predecir con antelación su posible aparición. Como han señalado los autores del hallazgo, cuando se detecte el riego en una paciente a través del análisis de sangre, esta debe ser derivada a un centro especializado donde se le administre el tratamiento médico necesario, incluido el ingreso en una unidad de cuidados intensivos si fuera preciso. 

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Actualizado: 19 de diciembre de 2016

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