El 82% de los veterinarios atiende ingestiones tóxicas por navidades

El turrón es uno de los grandes protagonistas de las Navidades, pero si no tenemos cuidado con dónde lo dejamos, nuestras mascotas podrían ingerirlo, algo de lo que alerta la Asociación Británica de Veterinarios (BVA) que ha publicado una encuesta sobre las urgencias veterinarias que se producen durante estas fechas señaladas y apuntan al chocolate como el mayor causante de las mismas en nuestros peludos amigos.

Según indican, el 82% de los veterinarios de animales de compañía en Reino Unido tuvo que atender al menos un caso de intoxicación por ingestión en las vacaciones de Navidad del pasado año. Casi la mayoría de ellos, un 81%, declaró haber tenido casos de perros que habían comido algo que no debían, una cifra que bajaba al 30% en los gatos y al 2% en el de los conejos.

El chocolate, la cebolla, el ajo, el xilitol, los huesos sobrantes de la comida y las decoraciones pueden ser peligrosos para las mascotas por lo que hay que tener especial cuidado con ellos

Las pasas, el chocolate, la cebolla, el ajo, el xilitol –un edulcorante– y las decoraciones propias de esta temporada, como el acebo o el muérdago, son algunos de los objetos que pueden ser peligrosos si son ingeridos por alguna mascota. Es más, el chocolate fue el principal riesgo comestible para los perros, pues el 94% de los veterinarios de la encuesta indicaron haber atendido al menos uno de estos casos, además de un 84% derivado de las pasas y un 29% por el xilitol de algunos alimentos.

Cabe recordar que el chocolate contiene sustancias tóxicas para los canes como la teobromina y la cafeína, estimulantes, siendo mayor su concentración en el chocolate negro. Convulsiones, dolor estomacal, deshidratación o aceleración cardiaca son algunos de los síntomas que pueden indicar que nuestro perro se ha intoxicado por ingesta de chocolate.  

Recomiendan no dar huesos a las mascotas

En los gatos la cosa era diferente, al parecer, estos animales tuvieron más probabilidades de acudir al veterinario por ingerir artículos no comestibles, como el muérdago, los lirios, la flor de pascua o el acebo, pues el 52% declaró haber tenido algún paciente minino con esta intoxicación, y sorprende que el 51% atendió casos de ingesta de anticongelante.

Daniella Dos Santos, vicepresidenta senior de la BVA, ha declarado: “Mi consejo para los propietarios es mantener todas las golosinas comestibles de forma segura fuera del alcance de narices curiosas y mantener a las mascotas con sus dietas normales, evitando alimentarlas con golosinas para humanos. Si le preocupa que hayan comido algo que no deberían, consulte a su veterinario de inmediato”.

Además, los adornos de Navidad pueden resultar tan atractivos como peligrosos para las mascotas. Por ello, recomiendan que las cintas, luces de árboles, las pilas o el papel de regalo se coloquen fuera del alcance de los animales. Otra de las advertencias que hacen desde la BVA es la de no dar huesos a los animales, que mucha gente suele hacer después de las comidas, pues pueden astillarlos causando perforaciones en el tracto digestivo.