El fármaco más prometedor contra el alzhéimer reduce el cerebro
11/04/2023
Lecanemab es un medicamento para tratar el alzhéimer que ha demostrado eficacia en los estudios en los que se ha estado probando y que constituye una gran esperanza para combatir esta enfermedad neurodegenerativa cuya incidencia sigue en aumento –se estima que hay 50 millones de afectados en todo el mundo– porque recientemente un ensayo clínico en fase III demostró que frenaba un 27% la progresión del deterioro cognitivo en pacientes en las primeras etapas de esta demencia, en comparación con el placebo.
Este ensayo se llevó a cabo en 1.795 pacientes de entre 50 y 90 años con alzhéimer temprano y el fármaco consiguió reducir los marcadores de proteína beta amiloide y las pérdidas cognitivas asociadas a la enfermedad. Sin embargo, el fármaco se encuentra todavía en fase experimental y se han observado efectos secundarios indeseados, como hemorragias que podrían estar relacionadas con la muerte de dos personas. Ahora, un nuevo estudio ha encontrado que el tratamiento con lecanemab provoca también una reducción acelerada del volumen cerebral.
En concreto, el análisis muestra que los pacientes que lo toman han experimentado una disminución del tamaño de su encéfalo un 28% mayor, que los que toman placebo. El donanemab, otro fármaco experimental contra el alzhéimer se ha asociado a efectos similares. Lo curioso es que la enfermedad de Alzheimer se caracteriza por destruir las neuronas y reducir paulatinamente el cerebro de los pacientes, y por ello sorprende tanto que un medicamento destinado a frenar su progresión provoque un encogimiento del encéfalo mayor que la propia patología.
Para realizar la nueva investigación sobre los efectos del lecanemab se han revisado los resultados de 31 ensayos clínicos de medicamentos diseñados para eliminar la proteína beta amiloide, una de las causas del alzhéimer. “Nuestros resultados son preocupantes”, ha advertido Scott Ayton, neurólogo de la Universidad de Melbourne (Australia) y principal autor del trabajo, que se ha publicado en Neurology. “No sabemos qué consecuencias puede tener la reducción del volumen del cerebro observada, por eso hacemos un llamamiento a que se hagan más estudios”.
Pérdida de volumen cerebral e inflamación del encéfalo
“Las compañías farmacéuticas que financiaron estos ensayos clínicos tienen una gran cantidad de datos que pueden aclarar este problema de la atrofia cerebral, pero esos datos apenas se han analizado y las empresas no los han publicado”, ha declarado Ayton, que fue asesor de Eisai, la compañía japonesa que ha desarrollado el lecanemab junto a la estadounidense Biogen. Este experto afirma que alertó a la empresa de estos resultados y les solicitó los datos detallados sobre volumen cerebral, pero no se los proporcionaron.
Lecanemab podría obtener la aprobación de comercialización este mismo año en Estados Unidos y la Unión Europea. De hecho, la FDA lo aprobó a principios de año por el procedimiento acelerado, aunque esta aprobación está vinculada a la realización de ensayos clínicos de fase cuatro que, si finalmente demuestran que el fármaco es eficaz, permitirían que la agencia concediera la aprobación tradicional al compuesto.
Los neurólogos Frederik Barkhof y David Knopman han destacado la “incertidumbre” sobre los efectos de la “enigmática” pérdida de volumen cerebral en un editorial que acompaña al artículo de Ayton. Y afirman que, aunque es posible que no tenga un impacto en la salud de los pacientes, descartan que el encogimiento del cerebro se deba únicamente a la desaparición de las placas de proteína amiloide, como ha sugerido un portavoz de Eisai en declaraciones al diario El País.
Los hallazgos del nuevo estudio también revelan que los ventrículos cerebrales de los pacientes se hinchan y que eso está relacionado con marcas de inflamación en el encéfalo. “Es preocupante que un marcador de salud cerebral como el volumen del encéfalo y de los ventrículos vayan en la dirección contraria” de lo que se esperaría con una intervención terapéutica, escriben los neurólogos, que señalan que para comprobar si se obtienen los resultados deseados o no la única solución es seguir observando a los pacientes que tomaron estos fármacos.
Actualizado: 21 de abril de 2023