Europa rectifica y aprueba el polémico lecanemab que frena el alzhéimer
15/11/2024
Después de reevaluar su opinión inicial, el Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la EMA ha recomendado aprobar la autorización de comercialización para Leqembi (lecanemab). Este esperado y polémico medicamento está destinado al tratamiento del deterioro cognitivo leve (problemas de memoria y pensamiento) o demencia leve debido a la enfermedad de Alzheimer en etapa temprana, específicamente en pacientes que tienen una o ninguna copia del gen ApoE4, una variante del gen de la apolipoproteína E.
Este fármaco fue aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) estadounidense en 2023, sin embargo en julio de 2024 el CHMP de la EMA emitió una opinión negativa sobre este fármaco debido a efectos secundarios como la frecuente aparición de anomalías en las imágenes relacionadas con el amiloide, que conllevan hinchazón y posibles hemorragias en el cerebro en los pacientes tratados, por lo que consideraban que los riesgos superaban a los potenciales beneficios.
Ahora, sin embargo, en esta nueva revisión, el CHMP ha concluido que los beneficios de Leqembi para ralentizar la progresión de los síntomas de la enfermedad son mayores que sus riesgos, en la población restringida evaluada en un nuevo estudio.
El neurólogo y director científico en Fundación CITA- Alzhéimer Pablo Martínez-Lage Álvarez, ha opinado al respecto en Science Media Centre España: “Yo creo que hay que felicitarse de que la EMA haya rectificado una decisión previa que se había tomado sobre unos argumentos poco sólidos. Tomó la decisión sobre la base de que el efecto beneficioso de este fármaco no compensaba los riesgos de posibles efectos secundarios. Era un argumento que no se sostenía con los datos de los ensayos clínicos que se han hecho”. Y argumenta que “Es un fármaco que consigue cambiar la historia natural de la enfermedad en sus fases más iniciales, en las que todavía no hay dependencia ni demencia. Cambia la progresión de la enfermedad en personas a las que se diagnostica alzhéimer cuando todavía están haciendo una vida normal o casi normal”.
“La EMA ha realizado un recomendación similar a la ya realizada por la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios del Reino Unido, en la que además de poner restricciones en el uso de este fármaco para excluir a los pacientes con mayor riesgo de complicaciones –como son los pacientes con dos copias del gen ApoE4–, subraya que el medicamento solo estará disponible a través de un programa de acceso controlado”, comenta la Dra. Raquel Sánchez del Valle, Coordinadora del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN), en una nota publicada por esta sociedad médica, donde se congratulan del cambio de opinión positivo de la EMA .
Qué es Leqembi, cómo funciona y qué riesgos conlleva su uso
Leqembi es el nombre con el que se comercializa el principio activo lecanemab y se administra por infusión intravenosa cada dos semanas. Este anticuerpo monoclonal se une a la beta-amiloide, una sustancia que forma placas en el cerebro de los pacientes con alzhéimer, reduciendo estas acumulaciones.
Los efectos secundarios más comunes de lecanemab incluyen reacciones a la infusión, anomalías encontradas en las imágenes relacionadas con el amiloide (ARIA, por sus siglas en inglés), ARIA-H, ARIA-E y dolores de cabeza. Desde la FDA también advierten que las hemorragias intracerebrales pueden ocurrir en pacientes tratados con esta clase de medicamentos y pueden ser fatales. Leqembi está contraindicado en pacientes que toman anticoagulantes, ya que podría aumentar el riesgo de hemorragias cerebrales, así como en pacientes que sufran hipersensibilidad grave a lecanemab-irmb o a cualquiera de sus ingredientes inactivos.
Leqembi presenta menor riesgo de efectos adversos en ciertos pacientes
Los pacientes con una o ninguna copia del gen ApoE4 tienen menos probabilidades de desarrollar anomalías relacionadas con imágenes amiloides (ARIA), un efecto secundario serio asociado con Leqembi que puede causar hinchazón y hemorragias en el cerebro, por lo que ahora el CHMP ha concluido que, en esta población restringida, los beneficios de Leqembi al ralentizar la progresión de los síntomas superan a sus riesgos. Esto representa un cambio respecto a su opinión de julio de 2024, cuando el uso del medicamento fue rechazado para una población más amplia de pacientes con Alzheimer en etapa temprana.
ARIA puede manifestarse como edema (ARIA-E), una acumulación de líquido en el cerebro, o hemorragia (ARIA-H), pequeños sangrados cerebrales. Aunque estas condiciones se pueden producir de forma natural en pacientes con alzhéimer, el uso de medicamentos como Leqembi que atacan la beta-amiloide puede aumentar el riesgo. En la reevaluación, se analizaron datos excluyendo a pacientes con dos copias del gen ApoE4, quienes son más propensos a ARIA.
En esta población restringida, el 8,9% de los pacientes tratados con Leqembi desarrollaron ARIA-E, comparado con el 12,6% en la población general; y el 12,9% presentó ARIA-H, frente al 16,9% en la población más amplia. Para los pacientes tratados con placebo, las tasas fueron del 1,3% para ARIA-E y del 6,8% para ARIA-H en la población restringida.
Eficacia demostrada de Leqembi en los pacientes a los que está destinado
En términos de efectividad, los resultados en la población restringida son consistentes con los observados en la población más amplia. El análisis incluyó a 1.521 pacientes con una o ninguna copia de ApoE4 de un total de 1.795 participantes. La medida principal fue el cambio en síntomas cognitivos y funcionales tras 18 meses, utilizando la escala CDR-SB, donde mayores puntuaciones reflejan un mayor deterioro.
Tras 18 meses, los pacientes tratados con Leqembi tuvieron un menor aumento en la puntuación CDR-SB en comparación con aquellos que recibieron placebo (1,22 frente a 1,75), indicando un declive cognitivo más lento. Otras medidas clave también mostraron resultados similares.
“Aunque estos nuevos tratamientos contra el alzhéimer están lejos de ser una solución perfecta, abren la puerta a futuros tratamientos que serán más seguros y eficaces, acercándonos a un día en que podamos ralentizar, detener e incluso revertir todas las formas de demencia”
Para reducir los riesgos, el CHMP ha exigido medidas específicas de seguridad. Los pacientes deberán someterse a resonancias magnéticas antes del inicio del tratamiento y antes de las dosis quinta, séptima y decimocuarta de Leqembi. Resonancias adicionales podrán realizarse si surgen síntomas de ARIA, como dolor de cabeza, confusión, cambios visuales, mareos, náuseas o problemas para caminar.
La empresa proporcionará guías para profesionales de la salud, tarjetas de advertencia para pacientes y programas de formación sobre ARIA. También deberá llevar a cabo un estudio de seguridad posterior a la autorización y crear un registro a nivel europeo para monitorizar los efectos secundarios y evaluar las consecuencias a largo plazo de ARIA.
La recomendación del CHMP es un paso intermedio para que Leqembi llegue a los pacientes. Ahora será enviada a la Comisión Europea para su decisión final sobre la autorización de comercialización en la UE. Posteriormente, cada Estado miembro decidirá sobre el precio y la financiación del medicamento, considerando su rol en el sistema de salud nacional.
En concreto, en nuestro país, “Tras esta recomendación oficial de la EMA, que en nuestra opinión es una gran noticia y muy sensata, serán las autoridades españolas las que decidan si este fármaco será financiado por el Sistema Nacional de Salud (SNS) y en qué condiciones. En todo caso, el Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología, realizará próximamente unas recomendaciones sobre los criterios a tener en cuenta para el buen uso de éste u otros fármacos similares en nuestro medio”, señala la Dra. Raquel Sánchez del Valle.
Leqembi, un fármaco contra el alzhéimer bien recibido por los especialistas
Juan Fortea, director de la Unidad de Memoria del Servicio de Neurología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y director de la Unidad Alzheimer en la Fundació Catalana Síndrome de Down afirma en declaraciones a SMC España que “este avance representa un hito para los pacientes con alzhéimer y marca un cambio de paradigma en su tratamiento”. “Aunque el uso estará restringido a una minoría en etapas tempranas, impulsará el desarrollo de capacidades diagnósticas y terapéuticas esenciales, como sucedió con las unidades de ictus, beneficiando a todos los pacientes, tanto los que reciben el fármaco, como los que no”.
En opinión de Mercè Boada Rovira, neuróloga y directora médica de Ace Alzheimer Center Barcelona “Europa necesitaba saber que teníamos la posibilidad de tratar pacientes, teníamos la necesidad de saber que toda la investigación en este campo continuaría y que entendíamos que lo que se tenían que acotar muy bien eran las restricciones”. Y añade que “Esta aceptación por parte de la EMA equilibra la situación para que nuestros pacientes de Europa y España tengan las mismas oportunidades que otros”.
Por su parte, Hilary Evans-Newton, directora ejecutiva de Alzheimer's Research UK, concluye en esta misma plataforma: “Aunque estos nuevos tratamientos contra el alzhéimer están lejos de ser una solución perfecta, abren la puerta a futuros tratamientos que serán más seguros y eficaces, acercándonos a un día en que podamos ralentizar, detener e incluso revertir todas las formas de demencia. Gracias a décadas de investigación, hemos avanzado enormemente en la comprensión del alzhéimer, y la investigación sigue siendo nuestra mejor esperanza para conseguir que esta devastadora enfermedad sea por fin cosa del pasado”.
Fuente: Agencia Europea del Medicamento (EMA)
Actualizado: 15 de noviembre de 2024