Fármaco desarrollado por el Vall d'Hebrón frena el avance del cáncer
28/10/2022
El fármaco Omomyc desarrollado en el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) a través de su spin-off Peptomyc, ha demostrado su eficacia y seguridad para combatir el cáncer en la primera fase de un ensayo clínico en el que han participado 22 pacientes. En concreto, esta mini-proteína terapéutica es capaz de inhibir la acción del gen MYC –que interviene en la progresión de muchos tumores– y estabilizar la enfermedad.
La Dra. Laura Soucek, codirectora del Programa de Investigación Traslacional y Preclínica y jefa del Grupo de Modelización de Terapias Antitumorales del VHIO ya había demostrado en las pruebas de laboratorio que Omomyc (o OMO-103) puede introducirse en las células y llegar a su núcleo, donde se encuentra el oncogen MYC, y, una vez allí, inhibir la capacidad de MYC para fomentar el crecimiento de tumores cancerígenos.
Los resultados del ensayo en fase I de la Dra. Elena Garralda, directora de la Unidad de Investigación de Terapia Molecular del Cáncer (UITM)-CaixaResearch del VHIO, se han presentado en el simposio internacional de ensayos clínicos ENA2022 organizado por las principales asociaciones de investigación en cáncer de ambos lados del Atlántico: la Organización Europea para la Investigación y el Tratamiento del Cáncer (EORT, siglas en inglés), el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos (NCI) y la Asociación Americana de Investigación en Cáncer (AACR), que se está celebrando en el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona (CCIB) y en el que participan 1.500 expertos internacionales.
Frena el progreso del tumor y aumenta la supervivencia del paciente
En la investigación de tratamientos contra el cáncer se ha buscado cómo neutralizar al oncogen MYC porque está involucrado en el crecimiento de muchos tumores, por ello, aunque la actual investigación solo ha superado con éxito la primera fase de ensayo con seres humanos y suelen necesitarse tres antes de que se apruebe y comercialice un fármaco, pero es la primera vez que un fármaco dirigido a MYC obtienen buenos resultados en un ensayo clínico de fase I, lo que abre una vía de esperanza para avanzar en el tratamiento del cáncer.
En un paciente con cáncer de páncreas que permaneció en estudio durante más de seis meses el tumor se redujo en un 8% y hubo una reducción del 83% en el ADN derivado del tumor que circula en el torrente sanguíneo
“MYC es uno de los objetivos más buscados en el cáncer porque desempeña un papel clave en la conducción y el mantenimiento de muchos cánceres humanos comunes, como el de mama, próstata, cáncer de pulmón y de ovario, y hasta la fecha, no se ha aprobado para uso clínico ningún fármaco que lo inhiba”, ha señalado la Dra. Garralda.
Los pacientes incluidos en el ensayo tenían diversos tumores sólidos, incluidos cánceres de páncreas, intestino y pulmón de células no pequeñas, y se les habían administrado tres tratamientos previos como mínimo. En ocho de 12 pacientes a los que se les realizó una tomografía computerizada al cabo de nueve semanas de tratamiento presentaban una enfermedad estable en la que el crecimiento del tumor se había detenido.
“Todavía es muy pronto para evaluar la actividad del fármaco, pero estamos viendo la estabilización de la enfermedad en algunos pacientes. Es destacable el caso de un paciente con cáncer de páncreas que permaneció en estudio durante más de seis meses, y en el que el tumor se redujo en un 8% y hubo una reducción del 83% en el ADN derivado del tumor que circula en el torrente sanguíneo. También hay un paciente con un tumor de la glándula salival cuya enfermedad se mantiene estable y todavía está en el estudio después de 15 meses, y un paciente con sarcoma, que había respondido muy poco a tratamientos previos, que se mantuvo estable ocho meses”, explica la Dra. Elena Garralda.
Respecto a los efectos secundarios adversos asociados al tratamiento con Omommyc son en general leves, y los más habituales consistieron en reacciones leves a la infusión intravenosa, como escalofríos, fiebre, náuseas, sarpullido e hipotensión. El aumento de dosis se relacionó con más reacciones a la infusión, pero se trataron con facilidad.
“Lo más emocionante es que los marcadores biológicos muestran claramente que estamos inhibiendo MYC con éxito. Además, los efectos secundarios adversos son en su mayoría leves, lo cual es importante cuando comenzamos a pensar en los próximos pasos y en combinar Omomyc con quimioterapia u otras terapias”, añade la Dra. Garralda.
“Omomyc es el primer inhibidor de MYC en completar con éxito un ensayo clínico de fase I y estar listo para pasar a un ensayo de fase II. Esto es un logro muy importante ya que MYC es una de las dianas más buscadas en el tratamiento del cáncer porque juega un papel clave en el desarrollo y mantenimiento de muchos cánceres humanos comunes, y, hasta la fecha, no se ha aprobado para uso clínico ningún fármaco que inhiba MYC. Este fármaco, desarrollado en el VHIO, es la primera mini-proteína dirigida a MYC que se prueba en un ensayo de fase I y demuestra que es capaz de inhibir la función de este oncogén de una forma segura y efectiva”, concluye la Dra. Garralda.
Actualizado: 5 de mayo de 2023