Un fármaco que trata problemas de corazón podría ralentizar el Huntington
03/12/2024
La enfermedad de Huntington (EH) es una patología neurodegenerativa hereditaria que afecta a unas 4.000 personas en España, según la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER). Lamentablemente, no tiene cura, por lo que los tratamientos están destinados a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Ahora, el hallazgo de un grupo de investigadores de la Universidad de Iowa Health Care (UI) podría ser un rayo de esperanza para los afectados y sus seres queridos, ya que han comprobado que un fármaco que se usa para tratar problemas cardíacos puede retrasar la progresión del Huntington.
El equipo de científicos analizó información clínica registrada en una gran base de datos de observación de más de 21.000 personas con Huntington y descubrió que el uso de fármacos betabloqueantes (que se emplean habitualmente para tratar afecciones cardíacas y de presión arterial) se asociaba tanto con una aparición significativamente más tardía de los síntomas de la enfermedad en las personas en las etapas presintomáticas, como con un ritmo más lento de empeoramiento de los síntomas en los pacientes con síntomas.
"Dado que no existen agentes modificadores de la enfermedad de Huntington, la posibilidad de que los betabloqueantes, que son baratos y tienen un perfil de seguridad conocido, puedan proporcionar beneficios a los pacientes en varias etapas de la enfermedad es muy emocionante", ha declarado en una nota publicada por la UI Jordan Schultz, profesor asistente de psiquiatría en la citada universidad y autor principal del estudio, que se acaba de publicar en JAMA Neurology.
Retrasar o prevenir la aparición de los síntomas del Huntington
El mecanismo de actuación de los betabloqueantes consiste en bloquear la acción de la noradrenalina, un neurotransmisor y hormona que interviene en la respuesta de "lucha o huida". Schultz y sus colegas se centraron en estos medicamentos porque sus investigaciones anteriores habían demostrado que, en comparación con las personas sanas, los pacientes con EH parecen tener un reflejo de "lucha o huida" más fuerte, incluso cuando están en reposo.
"Los pacientes con enfermedad de Huntington tienen un sistema nervioso simpático ligeramente más activo, que es lo que impulsa la respuesta de lucha o huida y, teóricamente, tienen más noradrenalina", explica Schultz. "Hemos planteado la hipótesis de que este cambio sutil puede contribuir a la neurodegeneración que se produce en la EH, y como los betabloqueantes inhiben la acción de la noradrenalina, queríamos saber si podrían tener un papel terapéutico en pacientes con EH".
Para investigar el posible efecto del uso de betabloqueantes, el investigador de la UI utilizó datos del mayor estudio observacional del mundo para familias con enfermedad de Huntington, conocido como Enroll-HD. Esta base de datos sigue a más de 21.000 pacientes con diagnóstico de EH o en riesgo de padecer la enfermedad a lo largo de su vida, y recopila información clínica anual sobre síntomas motores, funcionales y cognitivos, así como sobre el uso de medicamentos.
Los investigadores de la UI identificaron dos grupos distintos de pacientes con EH: aquellos con la mutación genética que causa la enfermedad, pero que aún no han comenzado a mostrar síntomas clínicos significativos (grupo pre-EH), y pacientes que ya han recibido un diagnóstico clínico de EH, denominados pacientes con manifestación motora (grupo mmHD). Dentro de cada grupo, identificaron a pacientes que habían estado tomando un betabloqueante durante al menos un año.
"Estos resultados proporcionan evidencia temprana de que el sistema nervioso autónomo puede ser un objetivo terapéutico para la modificación de la enfermedad de Huntington"
A continuación, el equipo emparejó a 174 usuarios de betabloqueantes preHD y 149 mmHD con el mismo número de usuarios similares que no usaban betabloqueantes. El análisis del equipo mostró que los usuarios de betabloqueantes en pre-HD tenían un riesgo anual significativamente menor de recibir un diagnóstico clínico de EH en comparación con los usuarios no betabloqueantes, lo que indica que el uso de betabloqueantes estaba asociado con un inicio más tardío de la EH.
Entre el grupo mmHD, los investigadores demostraron que los pacientes que tomaban betabloqueantes tuvieron una notable desaceleración del empeoramiento gradual de los síntomas motores, cognitivos y funcionales en comparación con los no usuarios. Retrasar o prevenir la aparición de los síntomas de la EH es un objetivo primordial para modificar el curso de la enfermedad. Al demostrar que los betabloqueantes se asociaron con una ralentización de la progresión de la enfermedad tanto en la fase presintomática como en la sintomática, estos nuevos resultados sugieren que los betabloqueantes pueden ser beneficiosos para los pacientes en diversas etapas de la enfermedad.
"Es importante destacar que este estudio informa asociaciones entre el uso de betabloqueantes en pacientes con EH y el retraso en la aparición y desaceleración de la progresión de la enfermedad, pero los datos no prueban causa y efecto", advierte Schultz, quien también es miembro del Instituto de Neurociencia de Iowa. "Sin embargo, estos resultados proporcionan evidencia temprana de que el sistema nervioso autónomo puede ser un objetivo terapéutico para la modificación de la enfermedad de Huntington".
Además de realizar más investigaciones para comprender cómo la disfunción autonómica observada en la EH podría ser objeto de modificación de la enfermedad, el equipo de UI también espera realizar un ensayo clínico de betabloqueantes como un potencial modificador de la enfermedad de Huntington.
Actualizado: 3 de diciembre de 2024