La hormona kisspeptina puede mejorar el deseo sexual masculino
15/11/2017
La salud sexual y reproductiva es objeto de estudio y materia de interés para investigadores de diversos campos, desde la psicología o la sociología, hasta la endocrinología. Y es precisamente esta última disciplina la que ha encontrado una nueva evidencia de algo que ya habían sugerido estudios anteriores: el apetito sexual de los hombres puede verse incrementado si aumenta la actividad de una hormona denominada kisspeptina.
El escenario elegido para presentar el estudio, llevado a cabo por científicos del King's College London (Reino Unido), ha sido la Conferencia Anual de la Sociedad de Endocrinología celebrada en la localidad inglesa de Harrogate. Según el mismo, y tomando como base una investigación similar anterior, el incremento forzado (de manera controlada en laboratorio) de la actividad de la hormona kisspeptina en un área determinada del cerebro de los ratones macho, en concreto en la amígdala cerebral, podría tener el potencial de reducir la ansiedad en los animales y aumentar su apetito sexual.
Así, observaron que si bien las neuronas sensibles a la kisspeptina motivan el deseo sexual y reducen la ansiedad, no sólo se fomenta el sexo, sino que se incrementan las posibilidades de una reproducción eficaz. ¿Cómo trasladar esto a los seres humanos? Para muchos hombres la ansiedad puede ser un desencadenante de la disfunción sexual por lo que el papel fundamental de la hormona kisspeptina en la regulación del comportamiento, tanto sexual, como social, podría ser tenido en cuenta para corregir trastornos en hombres relacionados con la ansiedad.
El aumento de la actividad de la hormona kisspeptina podría ayudar a corregir problemas de disfunción sexual en los hombres, así como algunos trastornos de ansiedad
Los autores del estudio han manifestado que no está claro si esta hormona tiene el mismo efecto en ratones hembras. Tampoco si es posible modificar la orientación sexual silenciando las neuronas receptivas a la kisspeptina, por lo que insisten en que se necesita seguir investigando en este camino para conocer realmente hasta qué punto la hormona condiciona los comportamientos sexuales, así como su implicación en humanos.
Kisspeptina, la hormona de la fertilidad
La kisspeptina, denominada así en honor a Kiss, una marca comercial del chocolate típico de la localidad en la que fue descubierta, es conocida por su papel crucial en la fertilidad, ya que hay evidencias científicas que señalan que la función de la kisspetina es estimular la producción de hormonas reproductivas como las gonadotropinas, que favorecen la maduración sexual durante el embarazo y la pubertad.
Sin embargo, estudios como el llevado a cabo por el King's College London, ponen de manifiesto que esta hormona también puede ser importante para nuestras emociones, excitación y deseo.
Actualizado: 4 de mayo de 2023