Las personas que se creen poderosas son más propensas a ser infieles
25/11/2024
Las personas con poder e influencia suelen tener confianza en sí mismas, por lo que no es de extrañar que se sientan también más capaces de atraer a posibles parejas. Esto no significa que todos los personajes influyentes o poderosos en el mundo de la empresa, la política o el entretenimiento vayan a ser infieles, pero parece que sí tienen más probabilidades de cometer una infidelidad, según un nuevo estudio publicado en Archives of Sexual Behavior.
La investigación ha sido realizada por psicólogos de la Universidad Reichman en Herzliya, en Israel, y de la Universidad de Rochester, en Estados Unidos, que llevaron a cabo una serie de experimentos para analizar cómo influyen las dinámicas de poder en la fidelidad en el marco de las relaciones de pareja.
Investigaciones previas han demostrado que el poder, tanto percibido, como real, puede proporcionar mayor sensación de confianza y derecho en las personas y hacer que se comporten de manera más impulsiva. Aquellos con mayor poder suelen ejercer más influencia sobre los demás o tener mayor facilidad para evitar ser influidos, lo que también repercute en su comportamiento.
Los autores del nuevo estudio se han enfocado en cómo estas dinámicas afectan específicamente a las relaciones íntimas y sus hallazgos muestran que las personas que sienten que tienen más poder dentro de la relación tienden a depender menos de sus parejas, a valorarse más a sí mismas y a estar más seguras de que otras personas las consideran atractivas.
Desequilibrios de poder que deterioran la relación de pareja
“En una relación romántica, estas dinámicas de poder podrían llevar al individuo más poderoso de la pareja a pensar que aporta más que su pareja menos poderosa”, ha declarado el autor principal Gurit Birnbaum, profesor de psicología en la Universidad Reichman en una nota publicada por la Universidad de Rochester. “Los más poderosos podrían ver esto como una señal de que tienen más opciones fuera de la relación y, en general, son más deseables como pareja”.
Los investigadores realizaron cuatro estudios para evaluar cómo afectaban las percepciones de poder sobre el interés en posibles parejas alternativas. Para ello, seleccionaron a participantes que tenían una relación monógama y heterosexual que duraba al menos cuatro meses. En el primer estudio pidieron a los participantes que describieran un momento en el que se sintieron poderosos frente a su actual pareja o, como comparación, un día normal de su relación. Luego, escribieron una fantasía sexual sobre alguien que no fuera su pareja.
En el segundo estudio y tras la misma prueba sobre la percepción de poder, los participantes observaron fotos de desconocidos y tuvieron que decidir con rapidez cuáles considerarían como posibles parejas. En el tercer estudio los participantes describieron las dinámicas de poder en su relación, evaluaron su percepción de valor como pareja en comparación con el de su pareja, y trabajaron en una tarea con una persona atractiva (un colaborador del estudio) para, finalmente, calificar su deseo sexual hacia esa persona.
“Cuando las personas se sienten poderosas y creen que tienen más opciones de relación que su pareja actual, pueden estar más inclinadas a prestar atención a otras alternativas potencialmente prometedoras”
Por último, en el cuarto estudio los dos miembros de varias parejas reportaron diariamente y durante un periodo de tres semanas su percepción de poder en la relación, su valoración como pareja y cualquier actividad sexual, como fantasías, coqueteos o encuentros con alguien que no fuera su pareja.
En todos los experimentos se comprobó que las personas que se perciben como más poderosas en su relación muestran mayor interés en potenciales parejas alternativas, incluyendo fantasías, deseos y comportamientos reales. “Aquellos con un mayor sentido de poder pueden sentirse motivados a ignorar su compromiso con la relación y actuar según sus deseos de aventuras a corto plazo o de tener otras parejas potencialmente más novedosas si surge la oportunidad”, señala Harry Reis, coautor del estudio y profesor de psicología en la Universidad de Rochester.
Además, aquellos con mayor percepción de poder suelen sobreestimar su propio valor como pareja en comparación con el de su compañero, lo que puede ser perjudicial para la relación. “Cuando las personas se sienten poderosas y creen que tienen más opciones de relación que su pareja actual, pueden estar más inclinadas a prestar atención a otras alternativas potencialmente prometedoras”, afirma Reis. “La creencia en tener otras opciones, como otras posibles parejas, puede debilitar su compromiso con su relación actual”, concluye.
Actualizado: 25 de noviembre de 2024