Sentirse solo puede aumentar un 50% el riesgo de muerte prematura

El riesgo de muerte prematura en personas solitarias podría ser igual o incluso mayor que la probabilidad de morir a consecuencia de la obesidad. Por difícil que parezca de creer, este ha sido el hallazgo de dos estudios de metaanálisis relacionados con las implicaciones de la soledad entre una muestra de individuos bastante amplia. Ambos han sido realizados por la Universidad de Brigham Young, en Estados Unidos, y se han dado a conocer en la 125 Reunión de la Asociación Americana de Psicología.

Sentirse solo puede llegar a incrementar el riesgo de muerte temprana hasta en un 50%, un dato que iguala e incluso supera otros como ser alcohólico o fumar 15 cigarrillos al día. Según la Dra. Julianne Holt-Lunstad, coautora del estudio, nos enfrentamos a una posible epidemia futura, por lo que hay que actuar a día de hoy para evitarlo.

Estos datos han sido obtenidos gracias a dos metaanálisis, en el primero de ellos, realizado en 2010, se observó 148 estudios de unos siete años de promedio, que incluían unos 300.000 adultos. En el segundo y más actual, se analizó a una muestra mucho mayor, más de 3,4 millones de individuos, en este caso de América del Norte, Europa, Australia y Asia.

Las relaciones sociales nos hacen cuidarnos

Al tratarse de un estudio observacional, en el que se analizan otros, no se puede encontrar una relación causa-efecto de la soledad y riesgo de muerte precoz. Sin embargo, los autores creen que podría deberse a que cuando tenemos relaciones sociales felices tendemos a cuidarnos más, correr menos riesgos con nuestra salud y a ser más activos que cuando nos vemos sumidos en la soledad.

El riesgo de muerte derivado de sentirse solo es igual o superior al de fumar 15 cigarrillos al día, ser alcohólico u obeso

Por ello, la Dra Holt-Lunstad insta a hacer más hincapié en el desarrollo social en el colegio, así como tenerlo en cuenta a la hora de que los médicos den un diagnóstico. Los adultos mayores también deben prepararse para la otra cara de la jubilación, y es que muchas de las relaciones sociales de estas personas son en el ámbito del trabajo, por lo que es importante que también las tengan cuando termine su etapa laboral.