Si fumaste en la adolescencia tus hijos tienen más riesgo de enfermar

Fumar durante la adolescencia puede tener un impacto negativo sobre la salud de los futuros hijos, según revela una nueva investigación de la Universidad de Bergen (Noruega) y la Universidad de Southampton (Reino Unido), que es la primera realizada en humanos que ha encontrado vínculos biológicos entre el tabaquismo en una etapa temprana de la vida y los descendientes.

Los investigadores examinaron los perfiles epigenéticos de 875 personas de entre siete y 50 años y los hábitos de tabaquismo de sus padres para analizar cómo el consumo de tabaco en los adolescentes varones puede dañar los genes de sus futuros hijos y, a consecuencia de ello, incrementar el riesgo de que presenten una función pulmonar deficiente y desarrollen asma y obesidad.

Estos científicos encontraron cambios epigenéticos en 19 sitios cuando mapearon 14 genes en hijos de varones que fumaron antes de los 15 años. Estos cambios en la forma en que el ADN se empaqueta en las células (la llamada metilación) regulan la expresión genética y están relacionados con el asma, la obesidad y dificultades respiratorias. Sus hallazgos se han publicado en Clinical Epigenetics.

“La pubertad temprana representaría una ventana crítica para los cambios fisiológicos en los niños porque es cuando se establecen las células madre que producirán espermatozoides el resto de sus vidas”

Los cambios en los marcadores epigenéticos fueron mucho más visibles en los niños cuyos padres comenzaron a fumar durante la pubertad. “La pubertad temprana puede representar una ventana crítica para los cambios fisiológicos en los niños. Aquí es cuando se establecen las células madre que producirán espermatozoides por el resto de sus vidas”, dice el coautor Dr. Negusse Kitaba, investigador de la Universidad de Southampton.

Cómo influye el tabaquismo en la salud de las futuras generaciones

“Nuestros estudios en los grandes estudios internacionales RHINESSA, RHINE y ECRHS han demostrado que la salud de las generaciones futuras depende de las acciones y decisiones que toman los jóvenes hoy, mucho antes de que se conviertan en padres. Esto se aplica especialmente a los niños en la pubertad temprana o a las madres y abuelas, antes y durante el embarazo. Es realmente emocionante que ahora hayamos logrado identificar un mecanismo que explica nuestras observaciones en las cohortes”, dice la profesora Cecilie Svanes de la Universidad de Bergen.

En el estudio también se compararon los marcadores epigenéticos relacionados con el tabaquismo de los padres antes de la concepción en personas que fumaban y en aquellas cuyas madres fumaban antes de la concepción. “Lo interesante es que 16 de los 19 marcadores asociados con el tabaquismo del padre en la adolescencia no se habían relacionado previamente con el tabaquismo personal o de la madre”, ha declarado Toril Mørkve Knudsen de la Universidad de Bergen, uno de los primeros autores del estudio.

“En realidad, esto puede indicar que las nuevas señales de metilación que hemos encontrado pueden ser cambios epigenéticos específicos que son exclusivos de la exposición de los padres al tabaco en la pubertad temprana”, dice Knudsen.

El número de jóvenes que fuman ha disminuido significativamente desde los años 50 y 60, pero los investigadores se han mostrado preocupados por el uso de cigarrillos electrónicos entre los jóvenes: “Algunos estudios en animales sugieren que la nicotina puede ser la sustancia del humo del cigarrillo que provoca cambios epigenéticos en la descendencia”, afirma el profesor John Holloway de la Universidad de Southampton. “Por lo tanto, es preocupante que los adolescentes de hoy, especialmente los varones, estén expuestos a niveles muy altos de nicotina a través del vapeo”, afirma.