Una inteligencia artificial detecta autismo en la mirada de bebés de 9 meses

El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que se suele diagnosticar cuando el niño tiene dos o tres años. Identificarlo en los primeros meses de vida sería muy beneficioso porque se podría realizar una intervención temprana para ayudar al pequeño a desenvolverse y relacionarse mejor. Los avances tecnológicos suponen un gran impulso en este terreno, y ahora una herramienta de inteligencia artificial (IA) desarrollada en Asturias ha demostrado su capacidad para detectar el riesgo de autismo a través de la mirada cuando el bebé apenas tiene 9 meses.

El proyecto que ha alcanzado este logro se llama ‘Cómo mira tu bebé' y la Asociación de Familiares y Personas con Autismo de Asturias (ADANSI), que ha participado en el mismo, está trabajando para conseguir su desarrollo y su posterior introducción como prueba de cribado en el sistema sanitario del Principado de Asturias.

La prueba es sencilla y consiste en que una pantalla reproduzca vídeos de estímulo especialmente diseñados, mientras que otro dispositivo se encarga de analizar hacia dónde mira el niño para compararlo con los patrones que realizaría otro sin autismo. La herramienta se denomina POCTEAI y tiene un 93% de eficacia en los ensayos realizados, pero, además, el algoritmo de inteligencia artificial también aprende de sus resultados, por lo que es previsible que mejore sus aciertos con el tiempo.

Diagnosticar el riesgo de autismo en bebés de menos de 1 año

La Agencia Sekuens, derivada de la Consejería de Ciencia del Principado de Asturias, ha presentado los datos recogidos durante años por la herramienta de Adansi, que permitirá que los pediatras puedan detectar rasgos clínicos indicativos del trastorno del espectro autista (TEA) desde que un bebé tiene nueves meses, lo que supone un hito en el diagnóstico del autismo, que en la actualidad se realiza cuando el niño tiene alrededor de tres años.

Con la herramienta diseñada por el equipo de 'Cómo mira tu bebé' el riesgo de síntomas de TEA se pueden observar cuando el bebé tiene nueve meses

La investigación que ha obtenido estos esperanzadores resultados comenzó hace ocho años liderada por la investigadora Gloria Acevedo, que contó con la colaboración del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) para estudiar el comportamiento de bebés prematuros con el objetivo de analizar su mirada, su reacción ocular y frente a estímulos acústicos como, por ejemplo, la respuesta del bebé cuando se pronuncia su nombre.

Durante la presentación de los mismos Acebedo ha declarado que “los resultados han sido muy prometedores”, y ha calificado la experiencia como “un paseo por el primer año de vida del bebé”. En un resultado positivo “significaría que ese niño presente indicador de riesgo de desarrollar autismo, no que tenga autismo”. Para alcanzar esos resultados, “Nos hemos fijado en cómo mira un bebé de seis meses cuando un adulto señala algo con su dedo, o si atiende cuando se pronuncia su nombre”. Los síntomas de TEA se pueden empezar a observar cuando el niño tiene entre 18 y 24 meses, pero con la herramienta diseñada por el equipo de 'Cómo mira tu bebé' este plazo se adelanta hasta los nueve meses, “permitiendo al pediatra el poder derivar a ese niño y que inicie y pueda beneficiarse de una intervención lo más temprana posible”, concluye Acevedo.