Hallan un gen que podría predecir el cáncer de páncreas en diabéticos
04/03/2019
Desde hace tiempo la ciencia busca marcadores para la detección precoz del cáncer de páncreas porque su diagnóstico temprano aumentaría las probabilidades de curar a los enfermos o de mejorar su calidad de vida. Ahora, un estudio de la Clínica Mayo (EE.UU.) ha revelado que la clave podría estar en un gen llamado UCP 1, en el aumento de los niveles de glucosa en sangre, y en algunos cambios metabólicos que se producen años antes del diagnóstico de la enfermedad.
Según el doctor Suresh Chari, gastroenterólogo de esta institución y autor principal de este trabajo –que se ha publicado en la revista Gastroenterology–, los datos obtenidos en estudios experimentales y con animales han mostrado que los niveles del gen UCP 1 están significativamente más elevados en los pacientes con cáncer de páncreas en comparación con los controles, por lo que el UCP 1 podría usarse como biomarcador para predecir el desarrollo del cáncer de páncreas en grupos de alto riesgo, como los pacientes con diabetes tipo 2 que pierden peso involuntariamente.
Los hallazgos revelan que se producen tres fases metabólicas distintas antes de que se diagnostique el cáncer de páncreas
Para realizar el trabajo, los investigadores estudiaron una muestra de la población de pacientes con cáncer de páncreas y controles emparejados, y analizaron durante cinco años antes del diagnóstico del tumor los cambios en sus niveles de azúcar en sangre o glucemia en ayunas, y las modificaciones de su peso corporal y de los lípidos en la sangre.
A los pacientes, además, se les realizaron tomografías computarizadas seriadas durante ese tiempo. Gracias a estas pruebas de imagen se pudieron identificar cambios en la grasa subcutánea, la grasa visceral y el músculo. Los científicos hallaron que los cambios metabólicos en los participantes que luego desarrollaron cáncer de páncreas comenzaron 36 meses antes del diagnóstico, junto con un aumento de la glucosa en sangre.
Pérdida de peso y descenso en los niveles de lípidos
También encontraron que año y medio antes los pacientes adelgazaron involuntariamente y que los niveles en sangre de triglicéridos y colesterol, es decir, los lípidos, disminuyeron. Según los investigadores este fenómeno se da en otros tumores malignos y se debe a los efectos provocados cuando el tejido adiposo blanco se convierte en pardo, lo que sucede cuando se activan algunos genes y el UCP 1, el marcador de la grasa marrón, cuya función es generar calor.
De acuerdo a los descubrimientos de la nueva investigación existen tres fases metabólicas distintas antes de que se diagnostique esta enfermedad, y cada una de ellas se caracteriza por la aparición de un cambio metabólico. En la primera, que transcurre entre los 36 y los 18 meses antes del diagnóstico, se produce un aumento de glucosa en sangre. En la segunda, entre los ocho y los seis meses previos, disminuyen los lípidos, hay una pérdida de peso y se produce el pardeamiento de la grasa subcutánea y el aumento de la temperatura corporal. A partir de los seis meses, se suceden todos los cambios antes descritos, y también disminuyen la grasa visceral y el músculo.
Actualizado: 4 de mayo de 2023