Un análisis de heces podría detectar el cáncer de páncreas más común
09/03/2022
El cáncer de páncreas tiene una elevada mortalidad debido a que por lo general se diagnostica en fases avanzadas porque no se dispone de pruebas de cribado eficaces para detectarlo en sus inicios, pero una nueva investigación ha encontrado 27 microorganismos presentes en las heces que se vinculan con un alto riesgo de desarrollar un adenocarcinoma pancreático ductal, el tumor de páncreas maligno más frecuente –representa alrededor del 90% de los casos–, y este hallazgo podría servir para su detección mediante un análisis de heces.
Este estudio –publicado en la revista Gut– es el más completo hasta la fecha sobre cómo influye el microbioma en este tipo de cáncer y ha sido realizado por científicos del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), liderados por Núria Malats, y del Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL, Heidelberg), dirigidos por Peer Bork.
La firma molecular que constituyen estos 27 microorganismos en muestras de heces podría servir para identificar a las personas que tienen mayor riesgo de desarrollar un adenocarcinoma pancreático ductal y también para diagnosticar este tumor en pacientes con estadios más tempranos de la enfermedad. El CNIO y el EMBL han solicitado la patente de los resultados del estudio para crear un kit diagnóstico de cáncer de páncreas que permita detectar estos genomas microbianos en muestras de heces de manera no invasiva, rápida y barata.
Diagnosticar el cáncer de páncreas cuando todavía es curable
Los síntomas del cáncer de páncreas –que supone la tercera causa de muerte por cáncer en España, solo superado por el cáncer de pulmón y el colorrectal, y la séptima a nivel mundial– pueden manifestarse en las últimas etapas de la enfermedad cuando es frecuente que el tumor ya no se pueda extirpar quirúrgicamente, y por eso es tan importante desarrollar pruebas diagnósticas específicas, asequibles y no invasivas que puedan detectar precozmente la enfermedad y mejorar su pronóstico.
El alto valor predictivo de esta firma genética en heces podría servir como biomarcador para identificar a la población de riesgo de cáncer de páncreas
“En muchos casos, una vez se detecta el cáncer de páncreas es demasiado tarde. Necesitamos diagnosticar la enfermedad en estadios mucho más tempranos, antes de que aparezcan los síntomas, y para ello tenemos que identificar y definir la población de riesgo y disponer de buenas pruebas de cribado para detectar el cáncer cuando todavía es curable” señalan los investigadores.
Recientemente se han encontrado evidencias que sugieren que los microorganismos presentes en nuestro organismo, el denominado microbioma, podrían desempeñar un papel en el origen y desarrollo del adenocarcinoma pancreático ductal. Para estudiar este vínculo potencial los investigadores realizaron un estudio caso-control único con 136 individuos (57 pacientes recién diagnosticados, 50 controles y 27 pacientes con pancreatitis crónica) a los que extrajeron muestras de saliva, heces y tejido pancreático para analizar su microbioma.
Comprobaron así que el microbioma fecal estaba mayormente asociado al cáncer de páncreas, pero no así el oral. “Análisis sofisticados a nivel bioestadístico y bioinformático nos han permitido construir una firma de 27 microbios procedentes de heces, la mayoría bacterias, que discriminan muy bien los casos con cáncer de páncreas de los controles, tanto en sus fases más avanzadas como en las más tempranas” indican Malats y Bork. Una investigación independiente realizada en dos hospitales de Alemania y en 5.792 metagenomas fecales procedentes de 25 estudios de 18 países ha servido para validar esta firma genética, que en la actualidad también se está estudiando en población japonesa.
Como existen numerosos y muy diferentes factores de riesgo que pueden contribuir a la aparición del cáncer de páncreas, como la edad, la diabetes, la obesidad, la pancreatitis crónica, el consumo de tabaco y el abuso de alcohol, el grupo sanguíneo y los antecedentes familiares de cáncer, los investigadores tuvieron en cuenta estas variables clínicas para asegurarse de que los microbios identificados estaban relacionados con el cáncer de páncreas y no con la diabetes, la obesidad, etcétera. “No hay estudios que tengan esta profundidad de información”, han asegurado.
Los investigadores explican en Gut que el gran valor predictivo de esta firma genética en heces podría servir como biomarcador para identificar a la población de riesgo, y si se confirma su efectividad en ensayos clínicos se podría emplear para el diagnóstico temprano del cáncer páncreas. “Actualmente los programas de cribado están dirigidos a familias con agregación de cáncer de páncreas, que representa solamente un 10% de los pacientes con este tumor. La inclusión en estos programas de cribado de un análisis de heces para identificar esta firma microbiótica podría servir para detectar el resto de la población de riesgo”, avanzan.
Actualizado: 5 de mayo de 2023