Hallan una causa de la enfermedad inflamatoria intestinal (EII)
04/02/2022
El intestino humano contiene miles de millones de bacterias –lo que se conoce como microbiota intestinal– cuyo equilibrio afecta significativamente a nuestra salud, e incluso a nuestro bienestar emocional. Es fundamental que el sistema inmunológico esté bien regulado en el intestino para que solo ataque a los patógenos dañinos, respetando a los microorganismos que nos favorecen.
Este equilibrio puede ser alterado, por ejemplo, por tener estrés continuado o unos hábitos de vida poco saludables, como una alimentación inadecuada, dormir mal o el sedentarismo, entre otros, también influyen en estas bacterias y se consideran factores de riesgo que contribuyen a la aparición de enfermedad inflamatoria intestinal crónica (EII), un conjunto de patologías que cada vez es más prevalente.
Las causas por las que se producen las respuestas inflamatorias que dan lugar a estas enfermedades, sin embargo, no se conocen bien, pero ahora un equipo de científicos de la Universidad Técnica de Munich (TUM) ha identificado un mecanismo que hace que las bacterias intestinales interaccionen de forma inadecuada con las células en la capa de moco intestinal en XLP2, una condición que se relaciona con la EII. Estos expertos opinan que su hallazgo se puede aplicar a otras patologías intestinales y que podría ser un punto de partida para desarrollar nuevas opciones terapéuticas.
“El sistema inmunológico innato reacciona de forma exagerada a los microbios en el intestino”
Un defecto en el gen XIAP, que causa la rara enfermedad XLP2, desencadena una inflamación crónica de los intestinos en el 30% de los afectados, entre otros síntomas. Es frecuente que los bebés que presentan esta anomalía genética manifiesten síntomas graves como diarrea, dolor abdominal, debilidad y pérdida de peso poco después del nacimiento. En la actualidad no se conoce cuál es el mecanismo subyacente, ni se han encontrado tratamientos efectivos, excepto los trasplantes de células madre, que conllevan un elevado riesgo de muerte.
Una respuesta excesiva del sistema inmune innato
Los investigadores –liderados por por la Dra. Monica Yabal, Adam Wahida y Madeleine Müller del Instituto de Inmunología Molecular y la Clínica de Hematología y Oncología del hospital universitario de la TUM, Klinikum rechts der Isar– llevaron a cabo el estudio con organoides (células intestinales en una placa de Petri) y experimentos con animales. Identificaron el mecanismo subyacente a la respuesta inflamatoria y observaron cómo se vuelve crónica. “El sistema inmunológico innato reacciona de forma exagerada a los microbios en el intestino”, ha señalado Yabal. Mientras que el sistema inmunitario de las personas sanas elimina las bacterias que provocan enfermedades y después recupera su estado de reposo, en algunos pacientes con XLP2, se inicia una reacción en cadena fatal, que tiene como consecuencia una alteración de la composición de la microbiota.
Todos los seres humanos tienen receptores tipo toll (TLR) que se sirven de unas estructuras únicas, como moléculas en la pared celular, para detectar a los microbios perjudicialess. Cuando un TLR se une a una molécula, la sustancia señalizadora TNF y sus receptores TNFR1 y TNFR2 activan el sistema inmunitario para eliminar el patógeno, pero esto no funciona de forma adecuada en las personas con XLP2. En cambio, la unión del TNF al receptor TNFR1 en las células denominadas células de Paneth hace que mueran, lo que origina un círculo vicioso.
Esto se debe a que las células de Paneth en la capa de moco intestinal segregan sustancias antimicrobianas manteniendo así el equilibrio bacteriano en el intestino, pero la pérdida de esas células modifica la composición de la microbiota y las bacterias que son beneficiosas, como los clostridios, son atacadas y ya no pueden desempeñar su función reguladora. Esto vuelve a activar el sistema inmunológico.
Nuevos fármacos para frenar la respuesta inflamatoria
“Creemos que este principio también podría ser aplicable a otras enfermedades inflamatorias del intestino y no solo en pacientes con XLP2”, ha asegurado el profesor Percy Knolle, director del Instituto de Inmunología Molecular de TUM. También se han observado células de Paneth que funcionan mal en muchos pacientes con enfermedades inflamatorias del intestino por diversas causas.
Los resultados de la investigación, que se han publicado en Science Immunology, podrían servir de base al desarrollo de nuevos medicamentos. Durante muchos años se han utilizado fármacos que inhiben los receptores de TNF para tratar a los pacientes con inflamación intestinal crónica. Sin embargo, estas moléculas no son muy específicas y desactivan tanto TNFR1 como TNFR2. “Nuestros experimentos muestran que sería mejor si tuviéramos un inhibidor selectivo para el receptor TNFR1”, concluye Yabal.
Actualizado: 5 de mayo de 2023