Las infecciones de transmisión sexual causan 2,5 millones de muertes al año

Las epidemias globales de VIH, hepatitis viral e infecciones de transmisión sexual (ITS) siguen constituyendo una seria amenaza para la salud pública, ya que provocan 2,5 millones de muertes cada año, según muestra el nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS): ‘Implementación de las estrategias del sector de la salud global sobre VIH, hepatitis viral e infecciones de transmisión sexual, 2022–2030’.

Nuevos datos revelan que las ITS están aumentando en muchas regiones. En 2022, los Estados Miembros de la OMS establecieron una meta ambiciosa: reducir el número anual de infecciones de sífilis en adultos en 10 veces para 2030, de 7,1 millones a 0,71 millones. Sin embargo, los nuevos casos de sífilis entre adultos de 15 a 49 años aumentaron en más de 1 millón en 2022, alcanzando los 8 millones. Los mayores incrementos se observaron en la Región de las Américas y la Región de África.

Combinado con la insuficiente disminución en la reducción de nuevas infecciones de VIH y hepatitis viral, el informe señala amenazas para el cumplimiento de los objetivos relacionados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para 2030. “La creciente incidencia de la sífilis es motivo de gran preocupación”, ha destacado el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS.

“Afortunadamente, ha habido importantes avances en otros frentes, incluyendo el acceso acelerado a productos sanitarios clave, como diagnósticos y tratamientos. Tenemos las herramientas necesarias para poner fin a estas epidemias como amenazas a la salud pública de aquí a 2030, pero ahora debemos asegurarnos de que, en un mundo cada vez más complejo, los países hagan todo lo posible para alcanzar los ambiciosos objetivos que se han fijado”, añade Ghebreyesus.

Aumento de la incidencia de infecciones de transmisión sexual

Cuatro ITS curables –sífilis (Treponema pallidum), gonorrea (Neisseria gonorrhoeae), clamidia (Chlamydia trachomatis) y tricomoniasis (Trichomonas vaginalis)– representan más de 1 millón de infecciones diarias. El informe señala un aumento en la sífilis en adultos y materna (1,1 millones) y la sífilis congénita asociada (523 casos por cada 100.000 nacidos vivos por año) durante la pandemia de COVID-19. En 2022, hubo 230.000 muertes relacionadas con la sífilis.

Nuevos datos también muestran un incremento en la gonorrea multirresistente. A partir de 2023, de 87 países donde se realizó vigilancia de la resistencia antimicrobiana de la gonorrea, 9 países reportaron niveles elevados (del 5% al 40%) de resistencia a la ceftriaxona, el último tratamiento para la gonorrea. La OMS está monitoreando la situación y ha actualizado su tratamiento recomendado para reducir la propagación de esta cepa multirresistente de gonorrea.

En 2022 hubo 630.000 muertes relacionadas con el VIH, el 13% de ellas en niños menores de 15 años

En 2022 se registraron alrededor de 1,2 millones de nuevos casos de hepatitis B y casi 1 millón de nuevos casos de hepatitis C. El número estimado de muertes por hepatitis viral aumentó de 1,1 millones en 2019 a 1,3 millones en 2022 a pesar de las herramientas efectivas de prevención, diagnóstico y tratamiento.

Las nuevas infecciones por VIH solo se redujeron de 1,5 millones en 2020 a 1,3 millones en 2022. Cinco grupos poblacionales clave –hombres que tienen sexo con hombres, personas que se inyectan drogas, trabajadores sexuales, personas transgénero y personas en prisiones y otros entornos cerrados– siguen experimentando tasas de prevalencia de VIH significativamente más altas que la población general. Se estima que el 55% de las nuevas infecciones por VIH ocurren entre estas poblaciones y sus parejas. Las muertes relacionadas con el VIH continúan siendo altas. En 2022 hubo 630.000 muertes relacionadas con el VIH, el 13% de ellas en niños menores de 15 años.

Progresos en la ampliación del acceso a los servicios de salud

Los esfuerzos de los países y socios para ampliar los servicios de ITS, VIH y hepatitis están generando avances significativos. La OMS ha validado a 19 países por eliminar la transmisión de madre a hijo de VIH o sífilis, reflejando inversiones en cobertura de pruebas y tratamiento para estas enfermedades entre mujeres embarazadas. Botsuana y Namibia están en camino de eliminar el VIH, siendo Namibia el primer país en presentar un dossier para ser evaluado por la triple eliminación de la transmisión de madre a hijo de VIH, hepatitis B y sífilis.

A nivel mundial, la cobertura del tratamiento del VIH alcanzó el 76%, con el 93% de las personas recibiendo tratamiento logrando cargas virales suprimidas. Los esfuerzos para aumentar la vacunación contra el VPH y la detección en mujeres con VIH están en curso. La cobertura de diagnóstico y tratamiento para la hepatitis B y C ha visto mejoras leves a nivel mundial.

El informe propone las siguientes recomendaciones para que los países fortalezcan enfoques compartidos hacia el logro de los objetivos:

• Implementar diálogos de políticas y financiamiento para desarrollar casos de inversión transversales y planes de sostenibilidad a nivel nacional.
• Consolidar y alinear más la orientación específica de cada enfermedad, los planes y el apoyo a la implementación dentro de un enfoque de atención primaria de salud.
• Acelerar los esfuerzos para abordar la criminalización, el estigma y la discriminación en los entornos de salud, particularmente contra las poblaciones más afectadas por el VIH, hepatitis viral e ITS.
• Expandir enfoques y paquetes de eliminación multidisciplinaria, aprovechando las lecciones aprendidas de la triple eliminación de la transmisión de madre a hijo.
• Fortalecer el enfoque en la prevención primaria, el diagnóstico y el tratamiento en todas las enfermedades para aumentar la conciencia, especialmente para la hepatitis y las ITS.

Aunque los ambiciosos objetivos establecidos por los Estados miembros para 2025 y 2030 están impulsando el progreso, este es desigual entre las áreas de enfermedades. Con muchos indicadores aún alejados de lograr los objetivos globales, se necesita más voluntad política y compromiso para acelerar urgentemente los esfuerzos, concluye la OMS.

Fuente: Organización Mundial de la Salud (OMS)