Un fármaco en pruebas frena la esclerosis múltiple progresiva
31/08/2018
La esclerosis múltiple progresiva (EM) está asociada a un empeoramiento gradual de los síntomas y la discapacidad, y los tratamientos disponibles no han resultado suficientemente eficaces para frenar la progresión de la enfermedad. Ahora, Ibudilast, un fármaco que se aprobó en Japón en 1989 para tratar el asma y los accidentes cerebrovasculares, ha demostrado su capacidad para reducir un 48% la atrofia cerebral que provoca este tipo de EM.
El medicamento, que se toma por vía oral y que actualmente también se estudia para determinar su potencial como tratamiento de la esclerosis lateral amiotrófica y la adicción a las drogas, se ha probado en un ensayo clínico en fase II, realizado por la Cleveland Clinic de Estados Unidos, en el que han participado 255 pacientes a los que se ha seguido durante dos años. Estas personas fueron divididas en dos grupos de forma aleatoria, y a 129 de ellos se les administró diariamente Ibudilast, mientras los otros 126 recibieron placebo.
El tratamiento se mantuvo durante 96 semanas, y cada seis meses se realizaron estudios de imágenes obtenidas mediante resonancia magnética a los participantes, para analizar las diferencias en los cambios en el cerebro que se producían en ambos grupos. De esta forma, se descubrió una diferencia de 0,0009 unidades de atrofia cerebral, lo que representa aproximadamente 2,5 mililitros menos de pérdida de tejido cerebral en los pacientes tratados con el fármaco, en comparación con los que recibieron placebo.
Los pacientes tratados con Ibudilast perdieron aproximadamente 2,5 mililitros menos de tejido cerebral en, en comparación con los que recibieron placebo
Un medicamento relativamente seguro y bien tolerado
El ensayo clínico –denominado SPRINT-MS–, que se ha publicado en The New England Journal of Medicine, muestra que Ibudilat es relativamente seguro y bien tolerado (los efectos adversos más frecuentes asociados a este medicamento fueron síntoma gastrointestinales, dolor de cabeza y depresión), y sus hallazgos pueden contribuir al desarrollo de nuevas opciones terapéuticas para combatir las formas progresivas de esclerosis múltiple.
Los investigadores indican, sin embargo, que son necesarios nuevos estudios para analizar si la disminución de la atrofia cerebral que se ha observado influye sobre el pensamiento, la marcha y otros trastornos relacionados con la EM, y para comprobar si el fármaco, que ha recibido la designación Fast track o vía rápida de la FDA estadounidense, puede ralentizar la progresión de la discapacidad en los afectados por esta enfermedad.0
Actualizado: 4 de mayo de 2023