Descubren cómo se produce el trastorno del sueño de los noctámbulos
29/10/2020
Investigadores de la Universidad de California Santa Cruz (UC Santa Cruz) han mostrado cómo una mutación genética altera el ritmo de nuestro reloj biológico provocando el síndrome de retraso de fase de sueño, un trastorno del sueño que hace que los afectados sean incapaces de dormirse hasta muy avanzada la noche (habitualmente después de las dos de la madrugada) y tengan dificultades para levantarse por la mañana.
En un estudio de 2017 se descubrió que una mutación común causaba este trastorno del sueño alterando un componente clave del reloj biológico que mantiene los ritmos circadianos del organismo, y el nuevo hallazgo, que se acaba de publicar en Proceedings of the National Academy of Sciences, revela cuál es el mecanismo molecular involucrado en ello, abriendo así una vía hacia potenciales tratamientos.
Las variaciones genéticas que cambian las proteínas del reloj biológico pueden afectar a su regulación y provocar alteraciones de fase del sueño
Carrie Partch, profesora de química y bioquímica en la UC Santa Cruz, ha explicado que esta mutación tiene significativos efectos sobre los patrones de sueño de las personas, por lo que resulta apasionante identificar un mecanismo concreto en el reloj biológico que relaciona la bioquímica de esta proteína con el control del sueño humano.
Variaciones genéticas que alteran los patrones del sueño
Prácticamente todos los aspectos de nuestra fisiología están controlados por interacciones de las proteínas del reloj biológico en nuestras células. Las variaciones genéticas que cambian las proteínas del reloj pueden afectar a su regulación y provocar alteraciones de fase del sueño. Así, un acortamiento de los ciclos del reloj biológico hace que la gente se duerma y se despierte más temprano de lo normal (cronotipo diurno), mientras que el alargamiento del ciclo del reloj biológico causa el efecto contrario y la persona se acuesta y se levanta más tarde (cronotipo nocturno).
Según Partch, la mayoría de las mutaciones conocidas que alteran el reloj biológico son muy raras y constituyen una importante pista para que los científicos comprendan los mecanismos de dicho reloj, aunque una mutación concreta podría afectar solo a una persona de entre un millón. Sin embargo, la variación genética identificada en el estudio de 2017, que se publicó en la revista Cell, fue identificada en alrededor de una de cada 75 personas de ascendencia europea.
El alargamiento del ciclo del reloj biológico hace que una persona se acueste y se levante más tarde (cronotipo nocturno)
La frecuencia con la que aparece la mutación concreta involucrada en el síndrome de retraso de fase del sueño no se conoce aún, dice la investigadora. Los trastornos del sueño son complejos y hay muchos factores que influyen en los problemas para conciliar o mantener el sueño que pueden ser difíciles de diagnosticar, por lo que el hallazgo de una variación genética relativamente común asociada con una alteración de fase del sueño supone un progreso significativo.
Una mutación que afecta a una proteína del reloj biológico
La mutación afecta a una proteína denominada criptocromo, una de las cuatro proteínas principales del reloj. Dos de las proteínas de reloj (CLOCK y BMAL1) forman un complejo que activa los genes de las otras dos (período y criptocromo), que luego se combinan para reprimir la actividad del primer par, apagándose así y comenzando el ciclo de nuevo. Este bucle de retroalimentación es el mecanismo central del reloj biológico, que impulsa las fluctuaciones diarias de la actividad de los genes y los niveles de proteínas en todo el cuerpo.
Partch concluye que este marcador genético está realmente extendido, y que aunque aún falta mucho para comprender el papel que desempeña la prolongación del reloj en el retraso de la aparición del sueño, esta mutación es claramente una causa determinante del comportamiento nocturno en los seres humanos y puede ser una diana para desarrollar terapias capaces de acortar el reloj en las personas que experimenten un retraso de fase del sueño.
Actualizado: 5 de mayo de 2023