La OMS pide medidas más tajantes ante la nueva cepa de COVID-19

Hans Kluge, director regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha alertado sobre la nueva cepa del coronavirus que ha sido descubierta en Reino Unido y que cada vez está expandiéndose a más países. Según advierte el experto, esta cepa es preocupante porque es más contagiosa que otras, aunque reconoce que la enfermedad en sí es la misma, pues no hay cambios relevantes en los síntomas.

Aun así, el dirigente europeo ha pedido a los países que aumenten la vigilancia para poder detectar de manera precoz cualquier otra nueva cepa, así como investigar las transmisiones inusualmente rápidas o un aumento inesperado de pacientes graves con COVID-19. En conclusión, pide que cada país tome medidas más contundentes contra la pandemia, pues solo así se logrará frenar el ritmo acelerado de contagios.

Kluge insta a que se compartan más los datos sobre los casos de COVID-19 y sus particularidades, para poder así detectar cuanto antes cualquier cambio en el virus

"Esta cepa se propaga a todos los grupos de edad, pero los niños no parecen tener un mayor riesgo. Nuestra evaluación es que esta cepa puede, con el tiempo, reemplazar a otros linajes circulantes, por lo que si no aumentamos los controles para frenar su propagación se producirá un mayor impacto en los servicios sanitarios, ya de por sí estresados y saturados", ha explicado Kluge.

La importancia de las vacunas

Además, ha querido hacer un llamamiento a que se compartan datos sobre los casos y sus particularidades, pues así se podrá comprender mejor el alcance de esta nueva cepa y de las que puedan surgir más adelante. Para reducir la tensión hospitalaria y evitar muertes, pide que se usen las mascarillas correctamente, que se limiten las reuniones personales, se intensifique el lavado de manos, la distancia interpersonal, la realización de pruebas diagnósticas y los rastreos y se haga hincapié en la campaña de vacunación.

"La implementación de las vacunas es esencial, especialmente para reducir los casos de enfermedad grave en los grupos vulnerables, liberar la presión sobre los sistemas hospitalarios y evitar el riesgo de colapso sanitario. Esto supone un esfuerzo extraordinario, pero los beneficios son muchos". Por eso ha pedido que los estados donen y apoyen el acceso equitativo a las vacunas para evitar que otros países puedan quedarse atrás.