Una terapia celular mejora sustancialmente casos críticos de COVID-19
09/07/2020
Una terapia celular ha demostrado su eficacia contra la infección por coronavirus al reducir la mortalidad de pacientes con COVID-19 en estado crítico del 85% al 15%, según revelan los primeros resultados del proyecto BALMYS-19, coliderado por el profesor de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche e investigador del Instituto de Investigación Sanitaria de Alicante (ISABIAL) Bernat Soria, junto con el profesor Damián García-Olmo de la Fundación Jiménez Díaz (Universidad Autónoma de Madrid).
El medicamento se ha probado en 13 pacientes graves que se encontraban intubados en ventilación mecánica. En el estudio, que se ha publicado en The Lancet EClinicalMedicine, han participado otras seis universidades y seis hospitales españoles. Se trata de la primera terapia celular para tratar la enfermedad por coronavirus desarrollada y producida íntegramente en España, y se basa en células madre que poseen propiedades regenerativas, antiinflamatorias e inmunorreguladoras.
Pacientes con COVID-19 que no respondían a otros tratamientos
Durante el estudio piloto, se trató a pacientes críticos de coronavirus que no respondían a tratamientos convencionales con el medicamento celular, compuesto de células mesenquimales estromales alogénicas a dosis de 1 millón de células por kilo de peso, en una o varias dosis. Los resultados de su aplicación en pacientes con COVID-19 ingresados en UCI se compararon con la evolución clínica y mortalidad de casos similares.
La terapia celular produce una mejora clínica y radiológica generalizada en pacientes con COVID-19 grave, sin causar reacciones adversas
Los resultados mostraron que esta terapia celular produce una mejora clínica y radiológica generalizada sin causar reacciones adversas. La mortalidad de los pacientes disminuyó del 70-85% al 15% (2 pacientes), y a la mayoría de los pacientes que recibieron esta medicación se les retiró la intubación durante el periodo de recogida de datos.
Entre las mejorías observadas se incluyen una disminución de sus marcardores de inflamación (proteína C reactiva y ferritina), coagulación (dímero D) y daño tisular (deshidrogenasa láctica). También se comprobó que el medicamento no redujo el recuento de linfocitos y, por el contrario, los resultados indican que el nuevo tratamiento aumenta la presencia de linfocitos T (que atacan directamente al virus) y de linfocitos B (que sintetizan los anticuerpos).
Los medicamentos celulares son "medicamentos vivos" que deben ser administrados por profesionales sanitarios cualificados
Los autores de la investigación han explicado que los medicamentos celulares son "medicamentos vivos" que deben ser administrados por profesionales sanitarios cualificados y producidos por unidades acreditadas por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios. Conocer los fundamentos científicos biológicos de estas terapias, y la fisiología de la interacción entre fármaco y huésped es imprescindible para manejarlos correctamente.
El profesor Soria inició su investigación sobre medicamentos celulares en la UMH y, posteriormente, en el National University Hospital de Singapur durante la epidemia asiática de SARS-1 en 2003, donde observó el intenso infiltrado pulmonar en las biopsias postmortem de estos pacientes. En la infección por SARS-CoV-2 a diferencia del SARS-1, el cuadro clínico muestra una depresión del sistema inmune (linfopenia), una respuesta hiperinflamatoria generalizada, daño tisular, hipercoagulabilidad y distrés respiratorio agudo, que obliga al ingreso en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Actualizado: 5 de mayo de 2023