El 59% de adultos y 29% de niños en Europa tienen sobrepeso u obesidad

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de que Europa ha llegado a niveles de epidemia de obesidad, y advierte que las cifras están yendo cada vez a peor. Y es que, el Informe Regional Europeo de Obesidad de la OMS refleja que el 59% de los adultos y el 29% de los niños tienen sobrepeso u obesidad.

Estas cifras son preocupantes, pues ambos problemas de salud se encuentran entre las principales causas de muerte y de discapacidad en Europa. Además, la OMS estima que el sobrepeso y la obesidad provocan más de 1,2 millones de muertes al año, es decir, un total del 13% de la mortalidad total de este continente.

Solo América tiene una prevalencia de obesidad en adultos superior a la de los 53 países que componen la región europea de la OMS. Por otro lado, de manera indirecta el exceso de peso puede aumentar el riesgo de desarrollar otros problemas de salud, como más probabilidades de desarrollar 13 tipos de cáncer, diabetes tipo 2 o enfermedades cardiovasculares.

Los motivos por los que ha aumentado la incidencia de la obesidad y sobrepeso no solo se deben a la combinación de dieta poco sana y poco ejercicio físico, sino que también han destacado el papel crucial de los factores ambientales, como la venta de productos ultraprocesados y el auge de juegos online sedentarios.

El informe también señala que las aplicaciones de entrega de comidas a domicilio posiblemente contribuyan a este problema de obesidad, al fomentar el comportamiento sedentario. 

Obesos, más riesgo de complicaciones por el COVID-19

Otra de las posibles causas de este aumento de los casos de obesidad y sobrepeso, según explican los expertos de la OMS, podría ser la pandemia de COVID-19, concretamente los cambios en los patrones de consumo de alimento y la reducción en la actividad física derivados de los confinamientos y los cambios de tipo de trabajo presencial a teletrabajo, con una tasa más alta de sedentarismo.

El COVID-19 ha aumentado las tasas de obesidad y sobrepeso por los cambios en la alimentación, la implantación del teletrabajo y el sedentarismo por confinamientos

Además, los pacientes con obesidad o exceso de peso pueden verse especialmente afectados por el coronavirus si se infectan con el SARS-CoV-2, pues se sabe que esta condición de salud aumenta el riesgo de presentar complicaciones e incluso las probabilidades de morir como consecuencia del COVID-19.

Es urgente enfrentar este problema tan predominante en los países desarrollados, y según ha explicado Hans Kluge, director regional para Europa de la OMS, “para cambiar la tendencia en Europa, necesitaremos crear entornos más propicios, promover la inversión y la innovación en salud, y desarrollar sistemas de salud fuertes y resilientes”.

Algunas de las recomendaciones incluidas en el informe incluyen intervenciones fiscales, como por ejemplo, la subida de impuestos a los refrescos azucarados, la implementación de subsidios para alimentos más saludables, limitar la venta de productos nocivos para niños y mejorar la atención de la obesidad y sobrepeso en la atención primaria.

También añaden que se debe hacer por motivar a la gente a mejorar la dieta y la actividad física a lo largo de la vida, interviniendo en la atención previa a la concepción y embarazo, promoviendo la lactancia materna y realizando estrategias en los entornos escolares para mejorar el acceso a alimentos sanos y promoviendo la actividad física.