Las personas mayores con gota podrían tener más riesgo de demencia
22/06/2018
La gota es una patología reumática que se debe a la acumulación de cristales de ácido úrico –o urato– en las articulaciones, y que causa inflamación y dolor en las extremidades –especialmente en los pies y en las manos– o las articulaciones (como el codo). Ahora, un nuevo estudio acaba de asociar esta enfermedad en los adultos mayores con un aumento de entre el 17 y el 20% del riesgo de desarrollar demencia.
Aunque la gota se produce cuando se elevan los niveles de ácido úrico en la sangre, no todas las personas con hiperuricemia padecen la enfermedad, que es más frecuente en los hombres, sobre todo si tienen antecedentes familiares. El tratamiento de la gota se basa en reducir estos niveles, sin embargo, no es conveniente que disminuyan demasiado, porque se considera que el ácido úrico ejerce un efecto protector sobre el cerebro.
La asociación entre gota y demencia aumentaba en las personas más ancianas, en las de raza negra, en las mujeres, y en aquellas con mayor comorbilidad médica
En estudios anteriores se habían observado ciertas contradicciones, ya que mientras algunos señalaban que la gota se asociaba con más probabilidades de sufrir demencia, otros afirmaban lo contrario. Esta nueva investigación, según ha explicado Jasvinder A. Singh, uno de sus autores y profesor de Medicina y Epidemiología de la Universidad de Alabama en Birmingham (Estados Unidos), ha encontrado que existe un riesgo significativamente mayor de presentar demencia por parte de los ancianos con gota.
La gota, factor de riesgo independiente de demencia en ancianos
Los investigadores analizaron los datos de 1,23 millones de beneficiarios de Medicare (un seguro médico), 65.325 de los cuales presentaban demencia, y comprobaron que la gota era un factor de riesgo independiente de este trastorno mental, tras ajustar otras variables de confusión como la presencia de otras enfermedades, el consumo de medicamentos, etcétera. La asociación, además, aumentaba en las personas más ancianas, en las de raza negra, en las mujeres, y en aquellas con mayor comorbilidad médica.
A pesar de los hallazgos, que se han presentado en el Congreso Europeo Anual de Reumatología (EULAR 2018), Singh ha advertido de que es necesario continuar estudiando las relaciones entre ácido úrico y demencia, así como averiguar cuáles son las vías patogénicas involucradas en este incremento del riesgo.
Actualizado: 9 de julio de 2018