Seguir la dieta mediterránea reduce el riesgo de mortalidad en mayores
21/01/2022
Una buena manera de asesorar a los mayores en el terreno alimentario es mediante la medición de los biomarcadores dietéticos en el plasma y en la orina. Precisamente esta técnica es la que han utilizado un equipo de investigadores del CIBERFES y la Universidad de Barcelona (UB) en colaboración con el Instituto Nacional de Envejecimiento (NIA) de Estados Unidos, para llevar a cabo un estudio que ha demostrado que una mayor adherencia a la dieta mediterránea podría reducir el riesgo de mortalidad en mayores de 65 años.
La investigación, ha analizado a 642 personas mayores de 65 años de la región de la Toscana de Italia a los que les midieron los biomarcadores alimentarios durante un periodo de 20 años. Estos datos se centraron en los grupos de alimentos recogidos en la dieta mediterránea, como frutas, verduras, legumbres o cereales, y se relacionaron con el riesgo de mortalidad de los participantes.
Los niveles de referencia elegidos fueron los polifenoles totales y metabolitos de resveratrol –que provienen de las uvas– en las muestras de orina, y en el plasma se midieron los carotenoides plasmáticos, selenio, vitamina B12, ácidos grasos y su proporción de monoinsaturados y saturados. El seguimiento de la dieta mediterránea y la frecuencia de alimentos se midió por un cuestionario validado y la mortalidad se avaluó mediante un modelo predictivo.
Usar los biomarcadores dietéticos para el asesoramiento nutricional
Durante las dos décadas que duró la investigación, que se ha publicado en BMC Medicine, se notificaron 425 muertes, 139 de ellas por enfermedades cardiovasculares y 89 derivadas del cáncer. Una vez se pusieron estos datos en relación con la puntuación en la dieta mediterránea se encontró que los que habían seguido este tipo de alimentación tenían menos probabilidades de morir.
Los biomarcadores dietéticos podrían mejorar la evaluación nutricional y ayudar a guiar el asesoramiento personalizado alimentario en los mayores
“Concluimos que una adherencia a la dieta mediterránea evaluada por un panel de biomarcadores dietéticos se asocia inversamente con la mortalidad a largo plazo en mayores, lo que respalda su uso en evaluaciones de seguimiento prolongado para monitorear los beneficios para la salud asociados con la dieta mediterránea”, afirma Tomás Meroño, coprimer firmante del estudio.
Estos resultados indican que el uso de biomarcadores dietéticos podría mejorar la evaluación nutricional y ayudar a guiar el asesoramiento personalizado en la alimentación en edades avanzadas, un hecho que podría mejorar la salud de las personas mayores y reducir su mortalidad.
Actualizado: 5 de mayo de 2023