Código Ictus, en qué consiste y cuándo se activa
Actualizado: 30 de octubre de 2024
El ictus se produce a consecuencia de una reducción o interrupción del riego sanguíneo al cerebro, que altera las funciones de este órgano y puede resultar mortal o dejar graves secuelas si no se detecta y trata a tiempo. Una de cada cuatro personas mayores de 25 años sufrirá un ictus a lo largo de su vida, según la Sociedad Española de Neurología (SEN), que señala que en España el ictus es la segunda causa de muerte y cada año lo sufren 110.000 personas, de las que fallecerá al menos un 15%.
El diagnóstico precoz del ictus es clave para instaurar el tratamiento más adecuado para evitar la muerte del afectado y reducir al máximo las complicaciones y la discapacidad que provocan las secuelas asociadas a esta enfermedad neurológica, y para ello en nuestro país contamos con un aliado inestimable: el Código Ictus.
Qué es el Código Ictus
La Dra. Blanca Fuentes Gimeno, neuróloga y jefa de Sección de la Unidad de Ictus del Hospital Universitario La Paz, en Madrid, nos explica que “el Código Ictus es un sistema organizativo en el que colaboran los servicios de emergencias extrahospitalarias y los hospitales con Unidad de Ictus, con el fin de que un paciente con un ictus agudo llegue lo antes posible al hospital, y que a su llegada esté todo preparado para atenderle inmediatamente, de tal manera que el tiempo que transcurra desde que se detecta que una persona tiene un ictus hasta que se empiece el tratamiento sea lo más corto posible”.
“En cuanto los servicios de emergencia identifican los síntomas sugestivos de ictus se activa el Código Ictus, que implica avisar a una ambulancia y al neurólogo de guardia del hospital con Unidad de Ictus más cercano”
La experta añade que “esta colaboración entre el servicio de emergencias extrahospitalarias y los hospitales cuenta con el apoyo de las autoridades sanitarias de cada comunidad. Es decir, que en la elaboración de esos códigos ictus participan también los servicios de salud de cada comunidad autónoma; en nuestro caso, por ejemplo, del Servicio Madrileño de Salud, que constituye un apoyo para ponerlo en marcha”.
Qué criterios indican que es necesario activar el Código Ictus
“El familiar o el testigo que detecta que una persona puede estar sufriendo los síntomas de un ictus –señala la neuróloga– suele ser el que llama al 112 o al 061, dependiendo de la comunidad, y en cuanto los servicios de emergencia identifican esos síntomas sugestivos de ictus a través de la persona que está al teléfono, para lo cual están entrenados y además disponen de unos algoritmos, se activa el Código Ictus. Esa activación implica que rápidamente avisan a una ambulancia para que vaya a atender al paciente, y para que en paralelo también se avise al neurólogo de guardia del hospital con Unidad de Ictus más cercano, que es donde se derivará al paciente”.
“Los criterios generales para activar el Código Ictus –indica– son que una persona tenga de forma súbita, estando previamente bien, una pérdida de fuerza o de sensibilidad en un lado del cuerpo, o algún problema del lenguaje –con dificultad para emitir palabras o para comprender lo que le dicen–, y también es posible que de repente experimente un episodio de inestabilidad en la marcha o un dolor de cabeza muy súbito, y que en el momento de la evaluación esos síntomas continúen”.
Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), los principales síntomas que alertan de un posible ictus y en cuya presencia es necesario solicitar ayuda médica, y que también sirven como referencia para la activación de código ictus del Plan de Ictus de la Comunidad de Madrid son:
- Pérdida de visión parcial o total en uno o ambos ojos.
- Debilidad muscular en la cara, un brazo o una pierna de un lado del cuerpo que se produce de forma brusca.
- Alteración o disminución de la sensibilidad, sensación de hormigueo o acorchamiento en la cara, brazo o pierna de un lado del cuerpo.
- Problemas para comunicarse y ser comprendido por nuestros interlocutores debido a una repentina alteración del habla, con dificultades para expresarse y para articular las palabras.
- Dolor de cabeza repentino, muy intenso y poco común, sin que exista ninguna causa aparente.
- Pérdida del equilibrio, inestabilidad o sensación de vértigo, e incluso caídas sin motivo, si se acompañan de alguno de los síntomas relacionados previamente.
Cómo funciona la Unidad de Ictus y qué profesionales la integran
Cuando llega el paciente al hospital y se ha activado el Código Ictus el neurólogo de guardia está esperando en el box de urgencias del centro para recibir directamente al paciente. El neurólogo colabora con los médicos y el personal de enfermería de los servicios de urgencias, y hay establecidos unos circuitos de Código Ictus intrahospitalario para facilitar el trabajo en paralelo y que todos los procedimientos que se deben hacer –análisis de sangre, evaluación neurológica, realización de un escáner…– se realicen lo antes posible, explica la Dra. Fuentes Gimeno.
Las Unidades de Ictus son llevadas por neurólogos, incluyen a personal de enfermería especialmente entrenada y a fisioterapeutas, y colaboradores de otras especialidades
Una vez que se ha confirmado el diagnóstico de ictus, en el caso de que sea un infarto cerebral se inicia el tratamiento en la propia urgencia y el paciente es trasladado a la Unidad de Ictus. Si se trata de una hemorragia cerebral, también se inicia el tratamiento de la tensión o de la hiperglucemia, o de la reversión de tratamientos anticoagulantes si el paciente los tiene, y también se le traslada a la Unidad de Ictus, donde se valora la situación clínica del paciente y se monitorizan una serie de parámetros muy importantes para su pronóstico, como la tensión arterial, la glucemia, la temperatura, la frecuencia cardíaca…
Las Unidades de Ictus son llevadas por neurólogos, que tienen además formados equipos multidisciplinares que incluyen a personal de enfermería especialmente entrenada y a fisioterapeutas, y cuentan con la colaboración de otras especialidades como radiología, cirugía vascular, neurocirugía, geriatría, medicina intensiva, hematología…; es decir, es un abordaje multidisciplinar, siempre coordinado por un neurólogo.
“Normalmente, los pacientes permanecen en la Unidad de Ictus unas 24-48 horas, dependiendo de su situación clínica, del tratamiento que se les haya administrado, de las complicaciones que padezcan, o que se puedan esperar… No hay una pauta fija, sino que se trata de una forma muy individualizada cada caso”, añade la neuróloga de La Paz.
Proyecto Tele-Ictus
El sistema de Tele-Ictus se utiliza sobre todo en los hospitales sin Unidad de Ictus cuando llega un paciente en esta situación porque a lo mejor es el centro más cercano a su domicilio o al lugar donde se encontraba cuando sufrió el episodio. “Si activan el Código Ictus los servicios de emergencia saben a qué hospital tienen que llevar al paciente, y solo le llevan a un hospital que disponga de Unidad de Ictus –afirma la Dra. Fuentes Gimeno–, pero hay muchas personas que prefieren coger el coche e ir a un hospital sin saber si tiene Unidad de Ictus o neurólogo. Y para esos casos se ha puesto en marcha el sistema de Tele-Ictus, que permite que el paciente sea evaluado rápidamente por un especialista –un neurólogo–, y en el caso de que requiera un tratamiento inmediato el propio neurólogo que le examina a través del sistema de Tele-Ictus hace la indicación, y los médicos del hospital en el que está el paciente se lo administran, y luego se realiza un traslado al hospital con Unidad de Ictus para continuar la vigilancia y los cuidados que necesita todo paciente con ictus agudo. Es una manera muy útil de acercar los tratamientos a los pacientes que lleguen a un hospital sin Unidad de Ictus”.
La experta señala que los resultados son igual de buenos, pero se necesita un segundo traslado, por lo que es importante mandar el mensaje de que, ante cualquier síntoma de ictus, hay que intentar avisar al 112, porque ellos son los que saben dónde tienen que llevar al afectado. Y para eso está estructurado el Plan de Ictus, en el que no solo participan los hospitales con Unidad de Ictus, sino también aquellos que cuentan con lo que se llama Equipo de Ictus, que es un equipo de neurólogos que ayudan en la formación del resto de profesionales de ese hospital para identificar los síntomas, colaboran con las Unidades de Ictus en el seguimiento de los pacientes, dan soporte cuando el paciente vuelve al hospital de origen…, todo ello con el objetivo de que el paciente que llega allí, o que sufre un ictus estando allí, se pueda beneficiar de los mismos tratamientos, y lo antes posible.
Proyecto One Step Ictus
En junio de 2022 el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona comenzó a gestionar el proyecto One Step Ictus para concentrar la atención al paciente de ictus isquémico y hemorrágico en una única sala de acceso directo de nueva construcción con el objetivo de reducir el tiempo de actuación desde que llega al Servicio de Urgencias hasta que recibe el tratamiento. Este proyecto pionero a nivel mundial ya lleva funcionando un año y permite la entrada del paciente desde la ambulancia o la sala de urgencias a la sala de intervención, de manera que se tarda alrededor de 15 minutos en atenderle.
Durante la presentación del proyecto la Dra. Pilar Meler, supervisora del área del conocimiento de Neurociencias de Vall d’Hebron explicó: “Observamos que el paciente que recibe tratamiento de forma más rápida presenta en general menos déficit motor, como hemiparesias, menos déficit sensitivo como hipoestesia, y menos déficits en el lenguaje como afasia o disartria”, que añadió que “agilizar el procedimiento mejora sin duda el pronóstico y calidad de vida de nuestros pacientes”.
"Con el traslado directo del paciente con ictus a la sala de angiografía, donde se hace la exploración y el tratamiento de forma inmediata, duplicamos la probabilidad de un buen pronóstico funcional de los pacientes con ictus más graves: calculamos que un 48% pueden llegar a conseguir una recuperación clínica casi total después de ser sometidos a una trombectomía directa, frente al 27% de los pacientes que siguen el circuito tradicional", ha explicado el Dr. Carlos Molina, jefe de sección del Servicio de Neurología, jefe de la Unidad de Ictus y coordinador del Proceso Ictus de Vall d’Hebron, en declaraciones a Diario Médico. El Dr. Molina ha señalado también que esta iniciativa supone un cambio en la forma de abordar la enfermedad que se puede implementar en otros centros hospitalarios.
Creado: 29 de octubre de 2021