Cómo se hace el enema opaco

Inicialmente se le indicará que se desvista y se ponga una bata de hospital. Se le cogerá una vía intravenosa por si es necesario administrar alguna medicación. Tumbado en una camilla boca arriba le tomarán una radiografía del abdomen. Después se le pedirá que se tumbe de lado y se le introducirá por el ano una cánula bien lubricada por donde se le introducirá lentamente el medio de contraste. La cánula puede disponer de un pequeño balón en su extremo que se hincha para evitar que se salga el contraste. Si tiene molestias le administrarán calmantes por vía intravenosa. Durante la introducción del contraste se recomienda respirar despacio y profundamente para estar relajado. También se recomienda hacer fuerza con el ano sobre la cánula. Por encima de la camilla habrá un tubo de rayos X llamado fluoroscopio que tomará imágenes radiográficas del procedimiento. Estas imágenes serán visibles por una monitor parecido a una televisión.

Durante la prueba, le pedirán que cambie de postura varias veces para que el contraste se distribuya por todo el colon. La camilla también se puede inclinar ligeramente y un técnico le puede apretar levemente el abdomen para facilitar el movimiento del contraste.

Normalmente la toma de imágenes con el contraste en el colon dura unos 10-15 minutos. Posteriormente, le retirarán la cánula y se dejará salir el contraste, para lo cual le facilitarán una cuña o le permitirán ir al baño. Habitualmente se toma otra radiografía tras la evacuación. Si le realizan la técnica del doble contraste, le introducirán aire posteriormente y le tomarán nuevas imágenes.

A menos que le indiquen lo contrario, tras la prueba podrá volver a comer y beber con normalidad. Se recomienda beber muchos líquidos para recuperar posibles pérdidas por los laxantes que se han tomado para preparar la prueba. Se puede notar que las deposiciones son blancas o rosadas durante 1 o 2 días tras la prueba.