Test genético
Facilitar un diagnóstico precoz, conocer si existe predisposición a padecer una enfermedad, o ayudar a decantarse por el mejor tratamiento para una patología son las posibilidades que ofrece el test genético.

Cómo se hace un test genético

Por: David Saceda Corralo

Médico Interno Residente, especialista en Dermatología Medicoquirúrgica y Veneorología

Actualizado: 29 de julio de 2022

Cuando llegues a la clínica para realizarte el test genético te harán unas preguntas generales sobre tu estado de salud: enfermedades importantes, factores de riesgo, estilo de vida, lugar de trabajo, etcétera. También te preguntarán por la salud de tu familia: padres, hermanos, hijos e incluso familiares de segundo grado como los abuelos o los tíos.

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Después te realizarán una exploración física general y es probable que te indiquen la realización de una analítica de sangre completa, así tendrán una idea de cómo te encuentras y qué tipo de test genético puede ser más útil para ti.

Días más tarde de esta primera visita, para que dé tiempo a obtener los resultados de la analítica, te citarán para recoger las muestras para realizar el test genético. El tipo de muestra a recoger varía  dependiendo del tipo de test que te vayan a realizar. Las dos muestras más frecuentes son la sangre o saliva. En el caso de la sangre, la muestra se recoge como si se tratase de una analítica habitual. La única diferencia es que la muestra se suele guardar y tratar de un modo especial, pero eso no te influye.

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Cuando se estudia la saliva, la recogida es aún más sencilla, consiste en recoger con un bastoncillo de algodón (una torunda) saliva de tu cavidad bucal. Para eso se recomienda acudir a la cita sin haber comido las horas previas ni haberse lavado los dientes, así la saliva que se recoge es lo más pura posible. Te pedirán que tragues dos veces, así limpiarás la boca, luego te introducirán el bastón y lo frotarán con la cara interna de ambas mejillas, la lengua y el suelo de la boca. No es molesto, es raro que provoque nauseas porque no se alcanza el paladar posterior en ningún momento. Lo realmente importante de esta muestra no es la saliva en sí, que está formada principalmente por agua, sino las células que se encuentran en la saliva. El bastoncillo se guarda en un tubo estéril y así se preserva el ADN hasta que se estudie en el laboratorio.

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Después de recogerte la muestra, que dura unos pocos segundos, podrás recoger tus cosas y realizar una vida normal hasta que te citen otro día para recoger los resultados. Antes de la realización de este tipo de test tienes que ser consciente de qué resultados te pueden aportar y de si estás seguro de que quieres conocerlos sean cuáles sean.

Complicaciones del test genético

No se conocen complicaciones del test genético. Es una prueba completamente segura que no entraña riesgos para las personas que se someten a ella. El único riesgo es conocer unos resultados negativos de la prueba que tal vez hubieses preferido no conocer.

Creado: 16 de agosto de 2013

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