Qué es un electrocardiograma y cómo prepararte
Actualizado: 7 de noviembre de 2023
El electrocardiograma (EKG o ECG) es una prueba diagnóstica no invasiva que evalúa el ritmo y la función cardiaca a través de un registro de la actividad eléctrica del corazón a lo largo del tiempo. Se utiliza para diagnosticar diversas afecciones cardíacas, como arritmias (anomalías en el ritmo cardíaco), insuficiencia cardíaca, enfermedad coronaria, y para evaluar el efecto de medicamentos o dispositivos cardíacos, como marcapasos.
El corazón late porque se emiten señales eléctricas que nacen de la aurícula derecha (en una estructura llamada nodo sinusal) y se transmiten por unas vías específicas que se distribuyen por todo el corazón, dando lugar al latido cardiaco. Esta actividad eléctrica se puede recoger a través de unos electrodos que se pegan en la piel del paciente, concretamente en la parte anterior del pecho y en los brazos y piernas.
Estos electrodos registran los impulsos eléctricos generados por el corazón y las representan en forma de líneas o curvas en un papel milimetrado, las cuales traducen la contracción o relajación tanto de las aurículas como de los ventrículos. Este registro gráfico en papel es lo que se llama electrocardiograma.
El gráfico resultante del ECG muestra las ondas que representan la despolarización y repolarización de las distintas partes del corazón durante un ciclo cardíaco. Los médicos pueden analizar estas ondas para detectar anomalías, evaluar la salud del corazón y tomar decisiones clínicas basadas en la información proporcionada por el electrocardiograma.
¿Cuándo se hace un electrocardiograma?
Hay muchos problemas, tanto cardiacos como no cardiacos, que alteran las corrientes eléctricas del corazón y que se pueden diagnosticar con un electrocardiograma. Se suele solicitar un EKG en las siguientes situaciones o para diagnosticar problemas cardíacos:
- En caso de dolor torácico u otros síntomas que sugieran una angina de pecho o un infarto de miocardio, palpitaciones, dificultad para respirar, mareos o desmayos, un ECG puede ayudar a determinar si estos síntomas están relacionados con problemas cardíacos.
- En caso de sospecha de arritmias cardiacas.
- En el estudio de sospecha de otros problemas cardiacos como pericarditis (inflamación del pericardio, una membrana que rodea el corazón), miocarditis (inflamación del músculo cardiaco o miocardio), problemas de las válvulas cardiacas, insuficiencia cardiaca, etcétera.
- En personas que llevan marcapasos, para evaluar el funcionamiento del dispositivo. Un ECG también se utiliza para evaluar la respuesta de un paciente a tratamientos específicos, como medicamentos cardíacos.
- Evaluación de enfermedades cardíacas conocidas: si una persona ya ha sido diagnosticada con una enfermedad cardíaca, como enfermedad coronaria, arritmias o insuficiencia cardíaca, los ECG se utilizan para controlar y evaluar la condición del corazón con el tiempo.
- En algunas patologías pulmonares como en la embolia de pulmón, en la que un trombo, que se produce generalmente en las piernas, migra hasta el pulmón y obstruye un vaso sanguíneo. Esta patología puede tener un reflejo en el corazón y sospecharse con un electrocardiograma.
- En trastornos de los iones como el potasio, el magnesio, el calcio, etcétera, pues su alteración también se refleja en un EKG.
- Los electrocardiogramas a veces se realizan como parte de los exámenes médicos regulares, especialmente en personas con factores de riesgo para enfermedades cardíacas, como antecedentes familiares de enfermedades cardíacas, hipertensión arterial o diabetes.
- Chequeos preventivos: en algunas circunstancias, como la realización de chequeos médicos de rutina o exámenes físicos para deportistas, los ECG pueden formar parte de la evaluación para detectar afecciones cardíacas subyacentes que podrían poner en riesgo la salud.
- Evaluación de emergencias médicas: cuando una persona es llevada a una sala de emergencias con síntomas cardíacos agudos, un ECG se realiza de inmediato para evaluar la situación y determinar el tratamiento adecuado.
- Preoperatorio: finalmente, se pide un electrocardiograma antes de una cirugía para evaluar la función del corazón del paciente, especialmente si es una intervención importante, y asegurarse de que esté en condiciones óptimas para la cirugía.
Preparación para un electrocardiograma
Estas son las cuestiones que debes tener en cuenta a la hora de someterte a un electrocardiograma:
Creado: 3 de agosto de 2012