Atragantamiento
En ocasiones, un resto de alimento o un objeto pueden atascar nuestras vías aéreas provocando un atragantamiento. Lo mejor para desbloquear la entrada y salida de aire es realizar la maniobra de Heimlich. Descubre cuándo y cómo llevarla a cabo.

Complicaciones de un atragantamiento

Por: Alicia Díaz

Enfermera, experta en Primeros Auxilios

Actualizado: 11 de octubre de 2024

Si se siguen correctamente los pasos anteriores se podrá manejar un atragantamiento, pero se deberá avisar a los servicios de emergencias si la víctima no expulsa el objeto asfixiante y pierde el conocimiento.

Igualmente, puede que algún resto del objeto o alimento que causaba la obstrucción se haya quedado y pueda causar molestias a posteriori. Si la persona afectada nota problemas al deglutir o tragar, tose con frecuencia, etcétera, es conveniente que acuda al servicio de Urgencias para ser examinado por un médico.

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Complicaciones o molestias tras un atragantamiento

Después de un episodio de atragantamiento, sobre si fue grave o requirió maniobras como la maniobra de Heimlich, es posible que la persona afectada experimente algunas complicaciones o molestias posteriores:

Dolor abdominal o torácico

Las compresiones abdominales de la maniobra de Heimlich pueden provocar dolor en el abdomen o en el pecho. Aunque suelen ser leves, en algunos casos pueden durar varios días.

Es importante que la persona observe si el dolor persiste o se agrava, ya que esto podría indicar una lesión más seria, como un desgarro muscular o incluso daño a órganos internos (poco frecuente, pero posible en casos de compresiones muy fuertes).

Lesiones en las costillas

La presión ejercida durante la maniobra de Heimlich o la reanimación cardiopulmonar (RCP) puede causar fracturas o fisuras en las costillas, sobre todo en personas mayores o con fragilidad ósea (osteoporosis).

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En estos casos, la persona puede sentir dolor al respirar profundamente, toser o moverse, lo que puede requerir evaluación médica si es muy intenso.

Dolor o irritación en la garganta

Si el objeto estuvo atascado en la garganta durante un tiempo prolongado, la persona puede experimentar irritación o dolor en la garganta. Puede haber dificultad leve para tragar o una sensación de ardor debido al trauma en las mucosas de la vía aérea.

Ronquera o cambios en la voz

Después del atragantamiento, puede haber cambios temporales en la voz, como ronquera o voz más débil, debido a la inflamación o irritación de las cuerdas vocales y la laringe. Esto generalmente mejora por sí solo, pero si persiste, es recomendable acudir a un médico.

Lesiones en la tráquea o vías respiratorias

En casos graves, el objeto puede haber causado lesiones en la tráquea o las vías respiratorias al pasar o al ser expulsado. Esto puede ocasionar:

  • Hematomas en el área.
  • Irritación de las mucosas.
  • Inflamación de la vía aérea, lo que podría causar dificultad respiratoria temporal o tos persistente.

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Tos persistente

Después de un atragantamiento, es común tener una tos residual durante un tiempo, debido a la irritación de las vías respiratorias. Esta tos normalmente debería mejorar en unos días. Sin embargo, si persiste o empeora, es importante consultar a un médico.

Neumonía por aspiración

En algunos casos, especialmente si el objeto o alimentos se inhalaron hacia los pulmones (aspiración), puede desarrollarse una neumonía por aspiración. Los signos a vigilar incluyen:

  • Fiebre.
  • Tos persistente.
  • Dificultad para respirar.
  • Esta complicación requiere tratamiento médico inmediato con antibióticos y, en casos graves, hospitalización.

Ansiedad o miedo psicológico

Algunas personas pueden experimentar ansiedad o miedo tras un episodio de atragantamiento, especialmente si fue un evento traumático o si sintieron que estuvieron en peligro de vida. Es posible desarrollar miedo a comer ciertos alimentos o a situaciones similares.

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Hematomas en el abdomen o pecho

Es común que después de la maniobra de Heimlich o la RCP queden hematomas en la zona del abdomen o el pecho, debido a la fuerza de las compresiones.

¿Cuándo consultar al médico?

Tras haber superado un atragantamiento, es importante consultar al médico si se presentan algunas de as siguientes señales de alarma:

  • Dolor intenso en el pecho o abdomen.
  • Dificultad para respirar o toser persistente.
  • Fiebre, escalofríos o síntomas de infección.
  • Cambios en la voz que no mejoran.
  • Dolor o dificultad al tragar durante varios días.

Aunque la mayoría de las personas se recupera completamente tras un atragantamiento, es recomendable estar atento a cualquier complicación que pueda requerir intervención médica.

Creado: 17 de octubre de 2011

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