Diagnóstico de la bronquiolitis obliterante
Por: Dr. José Antonio Nuevo González
Especialista en Medicina Interna. Servicio de Urgencias del Hospital Gregorio Marañón de Madrid
Actualizado: 23 de septiembre de 2022
Para establecer un diagnóstico adecuado de bronquiolitis obliterante puede ser conveniente realizar una biopsia pulmonar. Sin embargo, lo normal es que el diagnóstico se determine ante la presencia de ciertos factores como:
El diagnóstico diferencial debe realizarse con otras enfermedades que cursen con obstrucción de las vías aéreas.
En la radiografía de tórax el dato más característico es la insuflación pulmonar. Si se realiza un TAC de alta resolución, podrán apreciarse signos de inflamación de los bronquiolos, así como atrapamiento de aire en éstos, y un patrón en mosaico muy característico.
El examen de la función respiratoria mediante una espirometría muestra una alteración ventilatoria obstructiva (el aire no penetra bien en los pulmones) que no desaparece tras la administración de un broncodilatador (fármaco que se utiliza para dilatar las vías aéreas y permitir el paso de aire). Este hecho la diferencia de otras enfermedades cuyos síntomas podrían ser similares como el EPOC o el asma. En el test de difusión de CO encontraremos una disminución de sus valores sobre todo conforme la enfermedad avance.
En el lavado broncoalveolar, realizado mediante la broncoscopia, se observa un importante aumento de las células defensivas en los pulmones (neutrofilia). Esta prueba no es muy concluyente para el diagnóstico, pero permite descartar otras patologías. En algunos casos, como los pacientes transplantados, el diagnóstico definitivo de bronquiolitis obliterante ha de hacerse mediante biopsia pulmonar, que podría llevarse a cabo a través de la propia broncoscopia.
Creado: 19 de diciembre de 2011